¿De qué dinero vive Puigdemont en Waterloo? Esta incógnita se ha acrecentado al ver la declaración de bienes de Josep Maria Matamala. El empresario y amigo íntimo del expresident fugado de la justicia parecía que era el principal financiador del lider de JxCat. Pero, a tenor de lo que ha hecho público tras ser elegido senador, parece difícil que haya podido contribuir pecunariamente en la nueva vida de Puigdemont.
Matamala afirma que solo cobró 14.557,74 euros en el último año. Un montante que sorprende al ser el propietario de Incatis SL, una compañía que ha facturado 3,7 millones en el último lustro.
Por lo que respecta al resto de su patrimonio, el empresario nacionalista dice haber cobrado de la papelería Stein Girona SL un total de 13.148,52 euros, pese a haber estado todo un año junto a Puigdemont en Bélgica. Asimismo, de la empresa que factura millones --Incatis SL-- asegura haber recibido tan solo 780 euros de salario y 629,22 en forma de intereses.
¿Dónde está su fortuna?
No es la primera vez que se erigen suscitas con sus retribuciones. Una de sus primeras empresas dejó un pufo importante en el Institut Català de Finances (ICF) --la entidad de crédito pública de la Generalitat-- de más de 600.000 euros, lo que sería equivalente a los 100 millones de pesetas de la época. El empresario propietario de Linel Industrial se declaró en suspensión de pagos cinco meses después de recibir esta cantidad de dinero público.
El escándalo de crétido del ICF se llevó al pleno del ayuntamiento de Girona porque Matamala era concejal de CDC en esa ciudad. Fue en ese contexto en el que forjó una amistad con el entoces periodista de El Punt Carles Puigdemont que dura hasta ahora.
Mala reputación de su firma
Su apoyo incondicional a Puigdemont ha repercutido sobre sus negocios. El conglomerado Fòrum Gastronòmic SL, que monta las ferias gastronómicas homónimas en Barcelona, Girona y A Coruña, expulsó a la empresa actual de Matamala (Inactis) por el daño de marca que les estaba ocasionando la cobertura de su socio al prófugo. "No les quieren, han roto, y no por voluntad de los Matamala", indicaron a este medio fuentes cercanas.
Otro de los elementos que sorprende es que Matamala no indica en su declaración a a la asociación belga CATGlobal ASBL. El lobby domiciliado en la vivienda de Puigdemont en Waterloo y que quería inscribirse en el Parlamento Europeo para recibir fondos públicos promoviendo el separatismo. Matamala es, junto Jaume Cabaní, el máximo responsable de la administración de la entidad.