Arran ha atacado por quinta vez consecutiva la comisaría de la Policía Nacional de Terrassa (Barcelona) como represalias por la detención ayer martes de ocho de sus militantes en Madrid. Los radicales fueron arrestados mientras trataban de encadenarse a las puertas de la sede del Tribunal Supremo en una acción de protesta contra los juicios del 1-O, enmarcada en su campaña Rompamos la baraja. Tumbemos el régimen.
Ahora los cachorros de la CUP se centran en vengar la detención de sus compañeros, y el ataque contra la comisaría de la Policía Nacional de Terrassa --blanco recurrente de los independentistas-- es la primera de ellas. A través de Twitter, la sección de Arran de esta localidad ha manifestado que señalan a "los cuerpos represores del Estado en solidaridad con las ocho compañeras detenidas ayer en Madrid por protestar delante del Tribunal Supremo". En su mensaje, los radicales también incluyen uno de sus lemas recurrentes: "si nos tocan a una, nos tocan a todas", en un tono amenazante.
Más ataques
En el vídeo del ataque, grabado por ellos mismos, se puede ver como tres jóvenes encapuchados lanzan pintura contra el edificio en una acción relámpago de apenas 30 segundos. La fachada de la comisaría, la acera y la carretera han amanecido este miércoles impregnados de pintura amarilla. Una acción muy similar a la que llevaron a cabo los radicales hace menos de dos meses, cuando atacaron esta sede de la Policía Nacional ubicada en la calle Baldrich de Terrassa. En febrero Arran también arremetió contra la misma comisaría, que se ha convertido en objetivo prioritario de los cachorros de la CUP.
Esta mañana, la portavoz de Arran Adriana Roca ya ha advertido que su campaña Rompamos la baraja. Tumbemos el régimen "empieza ahora, pero no podemos avanzar qué acciones se realizarán".