Ada Colau veta el castellano en los taxímetros de Barcelona. El Área Metropolitana de Barcelona (AMB), que preside la alcaldesa de la ciudad, ha rechazado incorporar el español y el inglés en los recibos de los taxis, tal y como pedía el Partido Popular (PP).
Según las alegaciones presentadas a la última modificación del Reglamento Metropolitano del Taxi a las que ha tenido acceso este medio, el grupo metropolitano popular, que comanda Alberto Fernández Díaz, pidió que "los conductores estén obligados a extender el recibo del importe del servicio, que deberá ser entregado en catalán o castellano con todos los datos oficiales y obligaciones administrativas exigidas". Ello se hubiera podido hacer con la incorporación de la "exigencia de que el recibo del importe del servicio, a la que se encuentran obligados los conductores, además de ser con impresora conectada al taxímetro --con las excepciones previstas en el mismo artículo-- sea extendido en cualquiera de las lenguas oficiales en el ámbito de aplicación del Reglamento".
El AMB lo rechaza
En la respuesta a la que ha tenido acceso este medio, el Área Metropolitana rechaza la alegación del grupo popular, pese a que estaba tramitando una modificación del artículo que regula el uso del taxímetro en la capital catalana y su conurbación. Según la administración supramunicipal que preside Ada Colau, la petición de incorporar el castellano no ha lugar porque "los aparatos taxímetros de forma general no están preparados para ofrecer la posibilidad de elegir el idioma en el que se imprime el recibo".
Fuentes populares han recordado que es incomprensible que el AMB rechace la incorporación de la lengua castellano o incluso el inglés en los taxímetros de Barcelona y cercanías, pues los autotaxis que operan en esta zona los utilizan tanto vecinos como turistas internacionales o visitantes de ferias de negocios como el Mobile World Congress (MWC), cuya lengua materna raramente será el catalán.
Imprimir el recibo, tampoco
En paralelo a la demanda de los populares, la institución ha tumbado otra petición de la Agrupación Taxi Companys en la que la emisora pedía acabar con la obligatoriedad de emitir recibo aunque el cliente no lo solicite. La flota lo justificaba para alinearse con el "esfuerzo que hacen las administraciones en reciclaje" y para frenar "el gasto desproporcionado de los recursos naturales". En este caso, el AMB simplemente respondió que "el usuario tiene derecho a que le sea emitido el recibo del servicio utilizado".
Cabe recordar que la administración supramunicipal que preside Ada Colau acaba de aprobar la modificación de dos artículos del Reglamento Municipal del Taxi. Los dos puntos se referían a la obligatoriedad de emitir recibos de cada carrera y a medidas de modernización de los vehículos que operan en el área metropolitana. Un tercer cambio, referente a la explotación de licencias con conductores, se someterá al voto del pleno metropolitano en julio.