Santi Vila niega que haya dos millones de catalanes independentistas
El exconsejero de Puigdemont compara el auge del secesionismo en Catataluña con el triunfo de Trump y el surgimiento del movimiento 15M
13 marzo, 2018 00:47El exconsejero Santi Vila, que permaneció en el Govern de Carles Puigdemont hasta la víspera de la declaración unilateral de independencia, ha negado que existan "dos millones" de catalanes "comprometidos con la independencia", y ha atribuido el auge del soberanismo a la "indignación" que en "sus variantes en el entorno occidental" provocaron la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos o el surgimiento del movimiento 15M en España.
"No hay dos millones comprometidos con la independencia", ha asegurado Vila este lunes en Madrid, explicando que ese rango de población "siempre ha apoyado la oferta política catalanista" con la "novedad" de que actualmente existe, según el exconseller, "medio millón de ciudadanos", entre los que se incluye, que apoyaron el procés ante el inmovilismo del Gobierno de Mariano Rajoy y la pérdida de posiciones centristas en Cataluña.
"Tormenta perfecta"
Vila ha realizado estas declaraciones a preguntas del periodista Manuel Campo Vidal en la sede del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, en la que ha presentado, invitado por Next International Bussines School, su libro De héroes a traidores. El dilema de Cataluña o los diez errores del 'procés', que ha dedicado a aquellos "que no se cansan nunca de tender puentes", aunque ha descartado asumir esa responsabilidad: "No me veo en condiciones de tender puentes, porque nadie me lo ha pedido ni estoy en las circunstancias".
Vila ha defendido que su libro es un relato "subjetivo" pero "honesto" de lo vivido en las semanas anteriores a la declaración unilateral de independencia del Parlament, la culminación de "una tormenta perfecta", en sus propias palabras, que ha atribuido a la entrada de "activistas en las instituciones" y a la ausencia de "políticos de traje y corbata", así como a la "decisión equivocada" de Artur Mas de renunciar a la presidencia de la Generalitat en 2016 ante las presiones de la CUP. "Entonces perdimos el timón. Deberíamos haber convocado elecciones, y habríamos tenido algunos políticos profesionales más a la hora de tomar decisiones decisivas", según Vila, muy crítico con sus compañeros del PDeCAT y del Govern que abandonó el pasado 26 de octubre, después de que Puigdemont renunciara a la convocatoria de elecciones anticipadas.
Influencia de las redes sociales
Vila ha descrito el encuentro de Puigdemont con los miembros del Govern y "algunas personas que no había visto en mi vida y espero no volverlas a ver demasiado" en la noche del 25 de octubre y en la que el entonces president expuso, también ante representantes de Òmnium y la Asamblea Nacional Catalana (ANC), su "determinación" a la convocatoria electoral para evitar el 155.
"Es relevante que la crítica de ERC fue allí muy contenida, y Oriol Junqueras dijo que no compartía la decisión, pero que la respetaba, aunque después se subió el tono", ha dicho aludiendo al tuit "incendiario" del presidente del PP en Cataluña, Xavier García Albiol, en aquella determinante jornada augurando la intervención de las instituciones catalanas. "Las redes sociales han jugado un papel determinante en este proceso para mal", ha apostillado Vila.
Presiones a Rajoy
El que fuera conseller de Empresa de la Generalitat también ha contado cómo durante aquellos días "existió el compromiso de muchos políticos en activo, también de importantes agentes del sector financiero y de la Iglesia" para buscar una solución "más allá de los cauces formales para evitar el colapso".
"Mucha gente con buenas agendas personales que intentó no quedarse de brazos cruzados e intentó influir en un presidente y otro", ha concretado. "Me consta que el Gobierno de Rajoy también recibió este tipo de presiones, porque después iba a ser mucho más difícil cicatrizar heridas", ha añadido.
Apela al "pragmatismo"
Con ese propósito, Vila ha reclamado que tras "este año de resaca" exista el "compromiso de todos" y el "riesgo de todas las partes" para recuperar la normalidad en Cataluña. "Estamos en el momento de hacernos los locos", ha llegado a afirmar pidiendo "hacer memoria selectiva" a la hora de "pagar las facturas".
"¿De qué nos va a servir ser duros, implacables en el juicio político de lo que ha pasado?", se ha preguntado para recordar que incluso los "líderes principales del procés han admitido que, en el mejor de los casos, todo era simbólico". "Aunque sea solo por pragmatismo, si no estamos locos deberíamos hacérnoslo", ha sentenciado en alusión a las consecuencias judiciales del proceso independentista.
Frente judicial
En ese sentido, el exconseller, que pasó una noche en la cárcel y se encuentra en libertad provisional, ha señalado que "el frente judicial no ayuda a que un político asuma responsabilidades", pero también ha defendido que los ciudadanos sean "muy exigentes" con los líderes que "en octubre dijeron una cosa y ante el Tribunal Supremo otra distinta".
"Estaría bien que exigieran la trazabilidad del discurso", ha sentenciado pidiendo la recuperación del "centrismo" en Cataluña que añoran, según Vila, "centenares de miles de ciudadanos que no tienen voz política que les represente".