Màrius Carol en la presentación del libro de Santi Vila 'De héroes y traidores' / CG

Màrius Carol en la presentación del libro de Santi Vila 'De héroes y traidores' / CG

Política

Vila se moja por los políticos presos a pesar de las pullas de su partido

El exconsejero señala que con los dirigentes en prisión y Puigdemont en Bruselas es imposible reiniciar el diálogo y solventar el problema catalán

7 marzo, 2018 23:52

De la independencia a la petición de que los políticos catalanes presos puedan salir en poco tiempo. Del referéndum de autodeterminación a la reclamación de que Carles Puigdemont --en otro tiempo amigo-- regrese de Bruselas. Es lo que señala ahora Santi Vila, exconsejero de la Generalitat, que se bajó del barco en el último instante, justo antes de que se declarara la independencia en el Parlament, y después de haber hecho todo lo posible para que Puigdemont convocara elecciones, en la noche del 25 al 26 de octubre. Vila está solo, por ahora, y, tras recibir duras y sangrantes pullas de dirigentes de su propio partido, ¿hasta cuándo?, insistió este miércoles en esas dos consideraciones para poder “reiniciar un partido en un terreno que ahora es impracticable”.

El auditorio, repleto. Muchos asistentes de pie, en La Casa del Llibre, arropado por políticos que buscan, precisamente, una casa común para poder presentar alguna alternativa al independentismo, como Miquel Iceta y Ramon Espadaler. En primera fila también el exeurodiputado del PP Santiago Fisas, y más alejada --porque no cabía ni un alfiler-- la exconsejera Joana Ortega. En un lado, discreto, el exdemocristiano Roger Muntañola, que impulsó, junto a Antoni Fernández Teixidó, el partido Lliures, que espera su oportunidad.

El presidente... presente

También Xavier Trias, y, de pie, el presidente de Foment, Joaquim Gay de Montellà, y sentada en primera fila --eso sí-- la omnipresente Anna Balletbó. Pero nadie de su propio partido, salvo Sergi Miquel, líder de la JNC y diputado en el Parlament. Un atento Jesús Conte, exjefe de comunicación en los tiempos buenos de Jordi Pujol, y Toni Aira, el director de comunicación del PDeCAT. ¿Rull y Turull, o Artur Mas? No, no querían aparecer al lado de Santi Vila.

Vila quiso jugar, consciente de que el momento no está para demasiadas bromas, y que se agradece un poco de aire. “Me han dicho que vendría el presidente, y he pensado, vaya, igual sí, ya regresa, pero se trataba del presidente del Grupo Planeta, José Creuheras”, la editorial del libro que presentaba De héroes y traidores. Creuheras hizo el gesto, sonriente, de irse. Vila necesitaba ese respiro, después de que dirigentes de su partido, Josep Rull y Jordi Turull arremetieran contra él en las redes sociales, provocando un alud de comentarios en contra del exconsejero, en el que el más común ha sido el de “rata” por criticar, en el libro a Oriol Junqueras, a Marta Rovira y a miembros del PDeCAT por no haber permitido que Puigdemont convocara elecciones, aquel 26 de octubre, lo que “hubiera evitado sufrimiento y la actual situación”.

Miquel Iceta, entre otros, en la presentación del libro de Santi Vila 'De héroes y traidores' / CG

Miquel Iceta, entre otros, en la presentación del libro de Santi Vila 'De héroes y traidores' / CG

Miquel Iceta y José Creuheras, entre otros, en la presentación del libro de Santi Vila 'De héroes y traidores' / CG

La conciencia de Vila

Previamente, el director de La Vanguardia, Màrius Carol, le había alertado sobre esos “hiperventilados”, que hicieron imposible una salida electoral, que hubiera impedido --aunque Puigdemont considerara que nunca tuvo las suficientes garantías-- la aplicación del artículo 155 de la Constitución. “Si después de todo lo que ha pasado, todavía hay quien llama traidor por defender esa posición, entonces el país está mucho peor de lo que pensábamos”, aseguró Carol, en referencia a las tesis defendidas por Vila.

Si Santi Vila pudo haber dimitido antes o no, ya no servirá de nada. “Todo lo que hice fue después de analizarlo muy bien, bajo mi propia conciencia, y el momento llegó cuando constaté que se iba a declarar la independencia y que no se convocaban elecciones, como había defendido”, señaló.

Vila, ¿con qué partido?

Su posición ahora es que se debe hacer un esfuerzo “únicamente” para poder empezar el partido. Con un símil futbolístico, Vila entiende que el campo está “impracticable”, con la hierba demasiado alta, con las aficiones de los dos equipos exaltadas, y con poca iluminación. Carol aprovechó para añadir que, además, “el balón está pinchado”. Para poder arreglar ese campo de juego es necesario, a juicio de Vila, que los políticos presos salgan de la cárcel y que Puigdemont regrese de Bruselas. “En caso contrario será muy difícil, porque mucha gente está sensibilizada con eso, se organizan actos con sillas vacías, con lazos amarillos en las butacas, y eso se debe tener en cuenta”.

Si eso se produce, se podrá reiniciar un diálogo, según Vila, que pueda permitir el juego, de nuevo, para negociar y pactar lo que sea necesario. ¿Lo protagonizará Vila ese nuevo tiempo? ¿Con quién? En su partido lo tiene complicado, aunque él podía haber sido el elegido en unas elecciones, al frente del PDeCAT, con Junqueras como gran favorito para ser presidente. Pero Puigdemont no convocó, se presentó como candidato y marca, todavía, los nuevos pasos del independentismo. Y los "hiperventilados" sentencian a Vila por su "traición".