Bronco debate televisivo, muy difícil de moderar, entre los partidos que dieron apoyo a la aplicación del artículo 155 de la Constitución y las formaciones independentistas. Y en medio de ese frentismo, los comunes quedaron fuera de juego. Junts per Catalunya, ERC y CUP sacaron su única artillería, los “presos políticos”, especialmente contra PSC y Ciudadanos, relegando al PP a una posición marginal.

Durante el primer debate de los siete candidatos a las elecciones del 21D, Roger Torrent (ERC) fue especialmente incisivo con Inés Arrimadas (Cs), a quien preguntó si respetará los resultados del 21D. Ella dijo que sí y respondió con otra pregunta: “¿Respetarán las sentencias judiciales y las leyes?”. También arremetió contra Xavier García Albiol (PP), a quien recordó que hay “presos políticos” por culpa del Gobierno español.

Turull e Iceta, cuerpo a cuerpo

Jordi Turull (JxCat) y Miquel Iceta (PSC) entraron en el cuerpo a cuerpo. El socialista advirtió de que el 21D permitirá “volver atrás o pasar página": "Hemos acabado la legislatura con miedo. Estamos ante el gran fracaso de la unilateralidad, reconocido por sus propios dirigentes. Si la vía unilateral no funciona, hay que optar por salir de esa rueda que provoca dolor”, aseguró.

La reflexión encendió a Turull, quien le reprochó: “Mientras usted bailaba, había dirigentes independentistas en la cárcel. No puede venir aquí como si no pasara nada, ustedes son responsables del 155 y se manifiesta al lado de quienes gritan ‘Puigdemont a la prisión”.

El convergente dijo que Cataluña “no puede aguantar ni quince días más con el 155” y acusó a Albiol de “ejercer de pirómano, favoreciendo que las empresas salieran de Cataluña”. El candidato popular le precisó que “ha estado en la cárcel no por sus ideas, sino por cometer un golpe de estado”.

"La candidata de Aznar"

Xavier Domènech (CATComú) y Arrimadas protagonizaron un pulso más continuado en el que la cabeza de lista de la formación naranja reprochó a los comunes su coqueteo con los independentistas. “Si vuelven a gobernar los mismos, volverán a hacer lo mismo. Cataluña no se puede permitir cuatro años más de proceso”, dijo Arrimadas. Domènech afirmó que la solución “no es ni la independencia ni la señora Arrimadas, que es la candidata de Aznar. Ciudadanos vive claramente de la confrontación, de criticar una escuela pública que no han pisado nunca”.

Arrimadas atribuyó las críticas de los comunes a los nervios por no remontar en las encuestas. “Es significativo que nos critique a nosotros y eso significa que no tiene propuestas. Ustedes quieren que Puigdemont siga como presidente, el del partido del 3%”. Domènech negó que quiera dar apoyo a la independencia y ha reprochado a PDeCAT su política de recortes, de subvenciones a los colegios de élite y de apoyo al pacto de estabilidad del PP en el Congreso.

Carles Riera (CUP) habló de “Estado neofranquista y demofóbico” ante el cual “solo cabe la desobediencia”. Recordó la cifra dada de 1.000 heridos por las cargas policiales de 1-O. “Eso sí que genera miedo. Lo que genera fractura social es la pobreza”. Albiol, por el contrario, sacó pecho de la aplicación del 155 porque “ha evitado que la CUP siga desestabilizando Cataluña". "Me preocupa el paro, los barracones, las listas de espera. Hasta que no superemos esta etapa no podremos hablar de los problemas reales”, zanjó.