El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert

El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert

Política

La Generalidad y otras cuatro CCAA plantan a Wert porque no quieren evaluaciones educativas comunes ni externas

Los consejeros de Educación de Cataluña, Andalucía, País Vasco, Asturias y Canarias abandonan la sectorial de Educación al inicio de la reunión. Consideran que las evaluaciones finales de Primaria, ESO y Bachillerato pretenden "uniformizar", "homogeneizar" y "controlar" a todas las CCAA y que invaden sus competencias. El Ministerio recuerda que se trata de una fórmula habitual en otros países y que son una "garantía de que se han cumplido los objetivos en cada etapa".

21 abril, 2015 17:48

Los consejeros de Educación de los gobernos autonómicos de Cataluña, País Vasco, Andalucía, Asturias y Canarias han abandonado este martes la conferencia sectorial presidida por el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, como protesta contra el borrador del real decreto que establece las características de las evaluaciones finales de Primaria, ESO y Bachillerato.

Estos consejeros consideran que las evaluaciones comunes para todo el país pretenden "uniformizar", "homogeneizar" y "controlar" a todas las CCAA y que invaden sus competencias.

CCAA con gobiernos que no son del PP

Los consejeros disidentes denuncian que el hecho de que los alumnos se lo jueguen todo a una sola carta "rompe con el proceso de evaluación continua" y supone "echar piedras en el camino del alumnado".

Se da la circunstancia de que estas cinco CCAA son las únicas que no están gobernadas por el PP, lo que ha sido tildado de electoralismo por parte de algunos consejeros de otras CCAA.

Una fórmula habitual de "garantía de que se han cumplido los objetivos"

Por su parte, Wert ha calificado el desplante como una "falta de consideración, no sólo hacia el Ministerio y el Gobierno, sino especialmente hacia la mayoría de las CCAA".

El ministro ha defendido las evaluaciones comunes y externas de cada final de etapa por ser una herramienta para dotar al sistema educativo de "transparencia, rendición de cuentas y garantía de que se han cumplido los objetivos de cada etapa".

Además, ha recordado que se trata de una fórmula habitual en "los países con sistemas educativos de éxito". "La inexistencia de estas pruebas era una extravagancia", ha insistido.