Política
"Pedro Sánchez defendió en Barcelona un modelo en el que se dote a Cataluña de un trato fiscal especial y se la reconozca como nación. ¿Quién le ha dicho que puede decir lo que le dé la gana, comprometiendo seriamente al partido en asuntos cuyo pronunciamiento debe someterse a lo ya aprobado en resoluciones congresuales, en conferencias políticas, o en programas electorales? ¿En qué resolución está escrita una propuesta como esta?"
Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ex presidente de la Junta de Extremadura con el PSOE, en un artículo publicado este sábado en El Confidencial:
"El candidato a la Secretaría General del PSOE, Pedro Sánchez, defendió el pasado día 25, en Barcelona, el federalismo asimétrico como solución ante el choque de trenes entre Cataluña y el resto de España, un modelo en el que se dote a Cataluña de un trato fiscal especial y se la reconozca como nación.
Estos son los inconvenientes de dejar al albur a quienes han decidido volar por su cuenta en el seno del PSOE para ocupar el liderazgo de ese partido. ¿Quién le ha dicho a Pedro Sánchez, o a cualquier otro precandidato a secretario general, que puede decir lo que le dé la gana, comprometiendo seriamente al partido en asuntos cuyo pronunciamiento debe someterse a lo ya aprobado en resoluciones congresuales, en conferencias políticas, o en programas electorales? ¿En qué resolución está escrita una propuesta como la lanzada por el precandidato Sánchez en territorio catalán?
¿Qué pasa en el PSOE que oyendo cosas como estas o parecidas a nadie parece preocuparle ese tipo de pronunciamiento? Pareciera que no se hubiera aprendido la lección de cuando se dijo tan alegremente aquello de 'bajar impuestos es de izquierdas' o 'aceptaré aquello que venga del Parlamento de Cataluña' y que tan caro costó electoralmente al partido socialista que, por ese y otros pronunciamientos escuchados en silencio por una militancia que no estaba de acuerdo, comenzó a no ser percibido como un partido claramente socialista y profundamente español.
El PSOE no puede difuminar sus mensajes más esenciales a la conveniencia de los intereses particulares del primero que llegue con la aspiración de dirigir el partido y dispuesto a vender lo que sea como si el partido fuera una especie de teletienda. Quienes militamos en el PSOE lo hacemos en función de una ideología, un estilo, unas propuestas y una cierta idea del país que queremos. Algunos no vamos a estar dispuestos a seguir militando a ciegas y sin saber qué defenderemos en el futuro próximo, según gane fulano o zutano. Si ahora se trata de elegir al secretario general y eso conlleva el pasar por propuestas como la defendida por un precandidato, ¿qué será en noviembre cuando se vuelvan a convocar elecciones primarias para elegir candidato a la Presidencia del Gobierno? [...]".