Política

Mas monopoliza las pompas fúnebres de Suárez, un mito terminal

La prensa madrileña denuncia la instrumentalización del legado del presidente español por parte del president. La soberanista cambia de guión y descubre el modelo original de la Transición.

25 marzo, 2014 09:46

Contra todo pronóstico, el presidente de la Generalidad, Artur Mas, es uno de los grandes protagonistas de las pompas fúnebres del presidente Suárez. Seguramente también contra su voluntad, pues es conocida la modesta compostura de nuestro líder autonómico y su camaleónica capacidad para pasar desapercibido cuando la ocasión lo requiere. ¿No? El hombre es la medida de todas las cosas y Mas, el patrón universal. Transfigurado en un personaje de los Alcántara, Mas llegó a Madrid, presentó sus respetos ante la bandera española que cubría el féretro y convocó una rueda de prensa a las puertas del velatorio. Lo normal en esos casos: un funeral con cocktail y atención a los medios de comunicación. En general, quienes estuvieron contra Suárez se han limitado a exhibir sus dotes para el género necrológico en papeles y platós, orillando las polémicas porque en los obituarios se suele escribir de quienes ya no acusan el recibo, lo que evita entrar en detalles sobre el autor y su relación con el finado, si la hubo.

Una panorámica de la prensa, de aquí y de allí, rescata para la memoria a personajes como Landelino Lavilla, Martín Villa, Herrero de Miñón y algún otro histórico de la UCD, Unión de Centro Democrático, un efímero hallazgo, que muestran en general un talento protocolario para la despedida con honores de un hombre al que la clase política despreció con la ferocidad reservada a los enemigos íntimos.

Hay otras formas de afrontar el expediente. Ignacio Ruiz Quintano, en la contraportada del Abc, se engancha a la Movida, aquel tránsito del Dúo Dinámico a la moda juvenil, cuando Alaska, la misma, era la criatura de 15 años, pero con cresta, calaveras y faldas de lunares. Lo explica mucho mejor el columnista burgalés: "El suarismo terminó en cuanto una franquicia alemana del socialismo, que en la Universidad no existía, consiguió moldear en nuevo régimen la herencia mental del franquismo: providencialismo estatista, puños y rosas donde yugo y flechas, y contra bigotitos, barbitas". La sustancia política está a continuación: "El gobierno de España rescata la idea gallardoní de dar al aeropuerto de Barajas el nombre del fundador del suarismo (partido de un solo miembro), cuyo ministro más glamuroso, Joaquín Garrigues, susurraba en los cenáculos: 'Si la gente viera por un agujerito al Consejo de Ministros en sesión, correría a Barajas a tomar el primer avión al extranjero'".

De nombres y aeropuertos escribe también Raúl del Pozo en la contra de El Mundo: "La ceremonia no ha sido de toga pulla, ni de película de Arlington, pero ha tenido dignidad. El acto se ha escenificado en el Congreso que Suárez temía como los toreros a los miura, el lugar donde lo tuvieron encerrado una noche oscura, ignorando si lo iban a fusilar o no. (Me llama Kike Sarasola para decirme que Barajas pasará a llamarse Aeropuerto Adolfo Suárez. Nos da las gracias. De nada. Nos limitamos a difundir su idea)".

Bautismos de aeropuerto al margen del entierro, la ceremonia de "toga pulla" sólo tiene un pero para Del Pozo, eso del mitin de Mas. "Lo de ayer en el Congreso fue, sin embargo, admirable. Era como si por un día se hubiera prescindido del odio. Los políticos chuparon cámara y cirio, se comportaron con elegancia democrática. Sólo obró de manera ruin Artur Mas, que aprovechó el cadáver para decir que el ex presidente iba de frente, cuando él ni siquiera se atreve a defender el plan soberanista. Va a mandar a un propio", clama el cronista.

En la contraportada de La Razón oficia Alfonso Ussia, que repara en los deudos: "La gran fotografía de Adolfo Suárez y el Rey tiene un autor, que de haber cobrado sus derechos sería millonario. Adolfo Suárez Illana. Cuando el Rey le concedió el Toisón de Oro, Adolfo hijo organizó la visita. -¿Quién eres?- le preguntó Adolfo al Rey. -Soy tu amigo, le contestó Don Juan Carlos. Y entre las nubes, interpretó que era cierto, que aquella persona le recordaba algo y que, en efecto, le caía muy bien". Ussia sostiene que Suárez fue un invento del Rey como hay quien ha subrayado que el Rey fue un invento de Suárez, que se negó a retransmitir en directo la boda Borbón-Martínez Bordiu cuando dirigía RTVE. Arqueología de la Transición.

En El País firman la crónica principal a seis manos: Carlos E. Cue, F. Manetto y A. Díez. "Unidos solo por Suárez" es la versión descarnada del desfile en torno al féretro del primer presidente de la democracia en España. "Pocas cosas pueden unir a un país que sufre una de las peores crisis económicas y territoriales de su historia reciente. Tal vez por eso, ayer todos los dirigentes políticos destacaron que era un día triste, por la muerte de Adolfo Suárez, pero a la vez esperanzador, por la unidad que se creó alrededor de su figura. Solo Suárez ha logrado eso de momento, la unidad política al menos por un día", es el comienzo de una crónica ilustrada por el fotógrafo de Efe Ballesteros, quien firmara la instantánea de Tejero pistola en ristre. La imagen refleja al Rey, con bastón, y a los expresidentes Aznar, González y Zapatero. También se ve a Rajoy. Es una estampa hiperrealista que merecería la atención del pintor López.

El "proceso" es el metadato de la crónica, el punto de fricción:

"Fue el expresidente catalán Jordi Pujol quien resumió esa extraña sensación de luto alegre. 'Es bueno ver que una persona en el momento de morir suscita tanta adhesión sincera. Es bueno para el conjunto del país poder tener en la memoria un referente', señaló tras visitar la capilla ardiente. Artur Mas, sucesor de Pujol, mostró que esa unidad que destilaba la jornada está cuajada de problemas y desafíos. Después de saludar a la familia, Mas lanzó mensajes de fondo con un destinatario claro: Rajoy. Exigió al presidente que sea tan valiente como lo fue Suárez para afrontar la actual crisis independentista catalana. '[Suárez] miró de cara, no dejó que los problemas fueran pasando, no los soslayó, no los rehuyó, por eso respetamos su figura', recordó Mas".

¿Luto alegre? Retórica "informativa" para colorear la noticia, en las mismas líneas: "Pero las críticas indirectas de Mas a Rajoy y su fama de no afrontar los problemas, sentaron mal en el Gobierno y en el PSOE. Incluso un histórico dirigente de CiU como Miquel Roca afeó esa estrategia de Mas. 'Este es un mal momento para instrumentalizar la figura [de Suárez]', señaló cuando le preguntaron por las palabras del president". También está en la información de El País la respuesta directa del Gobierno, del ministro de Asuntos Catalanes: "El Gobierno contestó a Mas. Pero no lo hizo la vicepresidenta, que no quiso hablar a la salida de la capilla, sino José Manuel García-Margallo, el ministro que concentra la respuesta política a la tensión independentista catalana. Margallo aseguró que Suárez habría actuado 'de la misma forma que Rajoy' ante el reto soberanista catalán", informa Miguel González. "Rajoy, explicó, está 'atento' al desapego hacia España de parte de la sociedad catalana y ha hecho a Mas una 'oferta de diálogo sin fecha de caducidad', aunque eso sí, 'dentro de la ley'".

En los medios del soberanismo, el descubrimiento por parte de Mas de la figura de Suárez genera distorsiones imprevistas y no pocas sospechas. En Ara titulan: "Mas reclama un nuevo Suárez en Madrid". Deberían aclarar si lo de la Operación Reformista de Miquel Roca y Florentino Pérez fue un intento de eso o un extraño episodio que no conviene remover. Ahora y en Barcelona, Roca es el padre de la Constitución que sostiene que la consulta cabe en el texto y Florentino Pérez el instigador de una oscura maniobra judicial contra el Barça por el fichaje de Neymar. ¿Otro Suárez? "Suárez a medida" titula El Punt Avui.

En lo del presidente español la consigna catalanista era mirar para otro lado, como dicen que hace Rajoy. ¿España? Política internacional. Esa era la gracieta, alentada por los columnistas que no conocen más Transicion que la "nacional" organizada por Mas. El ataque de nostalgia de Pujol y la actuación de Mas en Madrid les han cambiado el guión y la orden del día. Es el aprovechamiento intensivo de los despojos: diálogo y consenso. Mas es el campeón del diálogo y Rajoy, el del silencio, "análisis" de goma para no salir del laberinto procesal.

El Periódico se abstiene de tomar partido y titula "Homenaje popular", un ejercicio de periodismo descriptivo. En La Vanguardia el titular es "El adiós de Suárez devuelve el espíritu de consenso". En la mirilla de la página 2 está una de las claves situacionales. Es la escena de Pujol en el patio interior del Congreso de los Diputados interpelando por su origen a los acompañantes de Pere Navarro, el viejo estilo del patriarca. "Pujol les preguntó a todos su procedencia y, conocida su prodigiosa memoria, seguro que ya no se le olvida ninguno". Poca gente no ha sufrido ese interés del president, un gesto de franca humanidad; el "¿Y tú, de quién eres?" que se les decía antes a los niños que veraneaban en el pueblo.

El remate lo pone José Antonio Marina en El Mundo:

"Confieso que me irritan los elogios, las condecoraciones y los honores póstumos, porque me parecen una despreciable cicatería. Los homenajes, en vida. Tampoco es este el tema que me interesa, sino la aparición -no sé si duradera o efímera- de un mito político, que es una creación del imaginario social. Hubo un tiempo en que estudié este interesante fenómeno. Elegí como personajes a Roosevelt, Churchill, De Gaulle y Kennedy. Todos ellos fueron personajes reales que dieron origen a una leyenda, que se convirtieron en narración estereotipada, en paradigma de comportamiento. Para ello, sus biografías fueron sometidas a una drástica selección, y prolongadas por un aura legendaria".

Lo que dice Quintano, esto es como para pedir un taxi a la terminal Adolfo Suárez, el mito.

Hay otras noticias. Los disturbios en Madrid del sábado tienen sumido en la perplejidad a Salvador Sostres y a media España. El titular de portada de El Mundo es tan terrible que se vale de las comillas: "Yo, siete puntos en la cabeza. Un oficial, treinta puntos y cuatro piños jodidos". Es una noticia de Fernando Lázaro y Jesús Alberto Yajure:

"Está claro quién lanzó las piedras contra la Policía tras la celebración de la marcha 'por la dignidad' en Madrid. Los grupos de radicales, extremadamente violentos, convirtieron las calles de la capital en un auténtico campo de batalla la noche del pasado sábado. Fruto de su actuación, 67 policías resultaron heridos, algunos de una consideración muy importante. El intercambio de mensajes de WhatsApp entre los miembros de las Unidades de Intervención Policial (UIP) que tuvieron que hacer frente a los radicales es revelador de la extrema violencia de la que fueron objetivo y del enfado de los agentes con sus mandos policiales. 'Yo, siete puntos en la cabeza. Un oficial, 30 puntos y cuatro piños jodidos', indica descriptivamente uno de los heridos en los altercados".

Todo esto sólo tiene una solución para Sostres: "Yo soy partidario de más mano dura porque siempre he pensado que educar es reprimir. Y los que critican al ministro del Interior por excesivo tendrían que saber que otros ministros del Interior, menos católicos y más protestantes, más exigentes con los deberes de cada cual y menos piadosos con las flaquezas de algunos, actúan con mucha más dureza y sin ninguna contemplación contra delincuentes, como los que atacaron a la Policía en la llamada Marcha de la Dignidad del pasado sábado".

Otra noticia, en El Mundo y El País. Un nuevo marrón en Unió. Jesús García firma la crónica en el segundo diario: "Unió Democràtica de Catalunya (UDC) se benefició, presuntamente, de una trama delictiva que vació los fondos de la Fundación Cataluña y Territorio, afín al partido democristiano. En un auto en el que da por cerrada la investigación después de cuatro años, el juez concluye que hay suficientes indicios como para que seis personas —incluido el exgerente de la formación, José María Núñez— se sienten en el banquillo de los acusados por una ristra de delitos: estafa, apropiación indebida, administración desleal, insolvencia punible, falsedad y simulación de negocios". El titular es "El juez ve indicios de que Unió se benefició de una trama delictiva".

En El Mundo la crónica es de German González: "Unió Democràtica de Catalunya vuelve a estar salpicada por un procedimiento judicial. El Juzgado de Instrucción número 21 de Barcelona ha cerrado la investigación por el presunto desvío de dinero de la fundación Catalunya i Territori, afín a esta formación, al grupo empresarial IMS. Además el juzgado considera que la entidad ha cometido otras presuntas irregularidades como supuestamente saldar deudas del partido con entidades que le prestaban servicios o renunciar al cobro de alquileres de cinco locales suyos que albergaban sedes del partido en Tàrrega, Lleida y Tarragona".

El avión malayo se estrelló en el Índico, asegura la compañía. Movida en Francia con el Frente Nacional, primera lista en la primera vuelta de las municipales en Perpiñán, entre otros resultados. Putin, expulsado del G-8, que ahora es el G-7. Ecos del clásico y caída de turistas rusos por la exigencia de visado, inquietud entre los comerciantes de la Sagrada Familia. Todo un desorden global. Y la aportación local: la agencia tributaria catalana busca "cerebros" en la Hacienda española. Lo afirma el Ara, que también ilustra a sus lectores con la existencia de una sección de funcionarios estatales en la ANC, según informa Roger Mateos.

25 de marzo, San Dimas, el buen ladrón, según Santopedia, y San Pelayo, según La Vanguardia.