Al sur de Cataluña se extienden las Terres de l’Ebre o Tierras del Ebro, un área formada por las comarcas de la Ribera de Ebro, la Terra Alta, el Montsiá y el Baix Ebre en la que existen innegables atractivos turísticos para que el visitante pueda disfrutar de la estancia en cualquiera de sus poblaciones.
Como cabe esperar, la vida en estos territorios se ha vertebrado en torno al río más caudaloso de España y por lo tanto es el auténtico protagonista de cada una de las rutas que se pueden realizar por las Terres de l’Ebre, ya sean estas de carácter deportivo, aventurero, gastronómico o cultural.
Principales atractivos
No hay duda de que el mayor atractivo de las Terres de l’Ebre es el Parque natural del Delta del Ebro, caracterizado por sus dunas móviles, sus zonas salobres, su flora y fauna y su gran diversidad ecológica.
Recorrerlo supone una actividad muy recomendada para los amantes de la naturaleza. A fin de cuentas es la zona húmeda más grande de Cataluña, así como el segundo hábitat acuático más importante en el oeste del Mediterráneo. Además, si se desea combinar con otro tipo de paisajes, no hay más que extender la ruta hacia el Parque Natural de Els Ports, compuesto por una zona montañosa en la que tanto la flora como la fauna cambian.
Localidades más destacadas
Si los visitantes de las Terres de l'Ebre optan por recorrer núcleos urbanos, el más importante es el de Tortosa, capital del Baix Ebre que cuenta con un amplio patrimonio histórico y artístico. Buena muestra del mismo son el Castillo de San Juan o de la Suda que vigila la ciudad desde la altura, la impresionante Catedral de Santa María de estilo gótico y toques barrocos, el Palacio Episcopal de origen medieval, los Reales Colegios, el Convento de Santa Clara y la Lonja Medieval, por apuntar solo los principales edificios.
Además de Tortosa, una visita a las Terres de l’Ebre también ha de llevar al viajero a localidades como Amposta, en la que está el Museo de las Tierras del Ebro; y Sant Carles de la Ràpita, Alcanar y Ametlla de Mar, todas ellas con el distintivo de Barrios y Villas Marineras debido a la belleza que atesoran y al pasado marinero que albergan en sus calles.
Lugares especiales
En toda la región hay lugares con una belleza y un significado especiales. Es el caso del Castillo de Miravet, uno de los mejores ejemplos de arquitectura templaria en toda Cataluña, y cuya estampa elevándose sobre uno de los meandros del Ebro proporciona una de las mejores “fotografías” de todas las Terres.
Pero no es el único, ya que el Centro de Interpretación del Ferrocarril que se puede visitar en Móra la Nova también resulta especialmente interesante para cualquier visitante interesado en el desarrollo industrial y en cómo este medio de transporte ha evolucionado a lo largo de los últimos siglos. Para los aficionados a la Historia, también les puede resultar atractivo recorrer los lugares donde se luchó durante la Batalla del Ebro, una de las más cruentas de la Guerra Civil Española y la más largas de todas (entre julio y noviembre del año 1938).
Cinco rutas recomendadas
Desde el Patronato de Turismo de la Diputación de Tarragona no dudan en recomendar cinco rutas para conocer mejor los encantos de estas tierras. Una de ellas es un paseo romántico por el faro del Fangar después de recorrer la playa de la Marquesa. Desde allí, al caer la tarde se observa una espléndida puesta del sol y las dunas del Delta.
Otra opción es disfrutar desde el propio Ebro, ya sea practicando kayak, paddle surf o recorriéndolo en la embarcación típica denominada llagut. En cualquiera de esas opciones se podrá disfrutar de las orillas del río.
Bodegas, gastronomía y senderismo
Las otras tres opciones que proponen en son visitar las bodegas situadas en la Terra Alta, una de las denominaciones de origen más en voga dentro de Cataluña, probar la gastronomía de la zona y la variedad de sus platos, y hacer senderismo.
En este caso, hay múltiples opciones, aunque una de las más populares es optar por los caminos que recorren la costa y que llevan hasta las playas más bonitas, donde en los meses de calor es posible darse un chapuzón.