Felices aniversarios de los diccionarios surrealistas de Bretón, Eluard y Dalí: "El surrealismo soy yo"
El centenario del Primer manifiesto del surrealismo se suma al medio siglo de la inauguración del monumento surrealista más grande del mundo en Figueres
10 julio, 2024 13:55Se cumplen 120 años del nacimiento de Salvador Dalí. Cien años de la publicación del Primer manifiesto del surrealismo. 50 de la inauguración del Teatro-Museo Dalí de Figueres, el monumento surrealista más grande del mundo. Y 35 de la muerte de Dalí. Sobradas razones para consultar el Diccionario privado de Salvador Dalí, de Mario Merlino. (Altalena Ediciones, 1980). Y el Diccionario abreviado del surrealismo, de André Breton y Paul Eluard. (Ediciones Siruela, 2003). Se publicó el 1938 cuando la Exposición Internacional del Surrealismo. Además, los surrealistas sentían fascinación por los diccionarios. Y la primera y más clara definición del Surrealismo fue de Salvador Dalí: “El surrealismo soy yo”.
El Diccionario abreviado del surrealismo aporta definiciones de escritores, artistas plásticos, cineastas y políticos. Con 31 firmas y las 220 ilustraciones. Recordando a Heráclito, el Agua: “es una llama mojada”. En ella nada el Cisne: “Emblema del surrealismo”. El Elefante: “es contagioso”. La Mariposa: “Las de cinco metros de longitud se rompen como los espejos”. Y el Asno: “Tiene en sus cromosomas el genio del poder paranoico y conquistador”.
Porque la Palabra: “Está hecha para confundir”. Quizá por esto, la Tierra: “Es azul como una naranja”. El Cielo. “Está pobremente vestido”. La Nube: “Se desviste sobre mesas carnosas”. La Luna: “Maravilloso vidriero”. Y la Razón: “Nube devorada por la luna”.
"El rojo irá a ver a la oreja"
Todo en ambos diccionarios parece y es Absurdo: “Alteración de la lógica el empleo del absurdo hasta alcanzar la razón”. Asoma en ellos el Humor: “No sólo tiene algo de liberador, sino también algo de sublime”. Es el Azar: “Mareo del humor”. Es divertida la Locura: “La única diferencia entre yo y un loco es que yo no soy loco”, definió Dalí. También dijo del Amor: “Sólo amo dos cosas: a Gala, mi mujer legítima, y al dinero”. Añadió otro autor: “El del amor es un olor de albor”. Distinto del Erotismo. “Ceremonia fastuosa en un subterráneo”. Y escribió Freud del Avión: “Símbolo sexual que sirve para desplazarse rápidamente de Berlín a Viena”. En cuanto al Beso: “El mundo es un beso”.
Cuando todo parece de color Azul: “Si una muer desmelena y te sigue, no tengas cuidado. Es el azul”. Cuando la Colina. “Sólo estaba inspirada por los labios pintados”. Los Labios: “Se leen como libros”. Y es el Embuste: “Duda con labios de vermut”. Para agradar, una Flor: “Encuentra flores que sean sillas”. Sin ni un Grito: “Residente de los huevos rojos”. Puede ser el Maquillaje: “Colorete en las axilas entre los dedos del pie”. Porque Todo cambia de Color: “Es cuando los colores dejen de estallar, el rojo irá a ver la oreja. Al fin y al cabo, es el Arte: “Concha blanca en una palangana con agua”. Y el Ojo: “Los locos del corazón”.
"Pedazos de sombra"
El surrealismo aún deja su Misterio: “Viento muy audaz en un arrabal”. Su Invierno: “Las plumas planean bajo la estufa. O sobre la Mesa: “Mesita de noche, mesa de luna”. Donde puede reposar un Cuchillo: “Sin hoja al que le falta el mango”. Una Corbata: “De cáñamo se anuda al cuello”. Y Ceniza: “Enfermedad del cigarro”. Marca el paso de su tiempo un Reloj de arena: “Hilillo de leche infinito que brota de un seno de vidrio”. Tras una Puerta: “Pedazos de sombra”. Llega el Sueño: “Poesía involuntaria”. Entonces reina la paz y no la Guerra: “Cuando la guerra se va, la poesía vuelve”.
Poesía: “Es lo real absoluto”. Y por fin se alcanza la Bondad: “Región inmensa donde todo queda en silencio.”