El Madrid de la República y la 'guerra' por el relato

La 'guerra' por el relato, por conocer qué pasó, pero también por cómo pasó. Los campos ideológicos se mantienen en todos los países, pero en particular en España. Y el centro de gravedad siempre es la Guerra Civil. Hay un relato que escriben los historiadores profesionales, y las publicaciones son constantes. No es cierto, por tanto, que en España, con la transición, se dejara todo en un cajón. Pero las 'historias', las vivencias, siguen siendo determinantes. Y una de ellas, desde un flanco que no ha proliferado tanto, es la que cuenta Carlos Floriano. Profesor de Economía Aplicada, y diputado del PP, Floriano ha querido plasmar a través de una novela una historia particular. 

Lo hace en Tan terrible es el odio (Almuzara). Se trata de una narración basada en hechos reales, con la idea de reflejar el Madrid republicano en los primeros instantes de la Guerra Civil. ¿Hubo odio? Lo hubo en los dos bandos enfrentados, constata Floriano. Y lo señala en una novela que es dura, que deja en evidencia cualquier relato 'buenista'. Los excesos se produjeron en las dos partes, aunque, oficialmente, lo que hubo fue un golpe de Estado protagonizado por una parte del Ejército.

Carlos Floriano, en una imagen en el Senado / PP

Floriano propone una visión que, sin caer en el olvido interesado y sin negar las evidencias, reivindica la reconciliación lograda en la época de la Transición como fórmula válida para superar de una vez por todas las heridas de la contienda. La derecha que representa Floriano, que sigue en las filas del PP después de haber sido secretario de Comunicación del partido entre 2008 y 2012, entiende que ha sido la izquierda la que se ha apropiado de ese relato sobre la Guerra Civil, un punto de vista que responsabiliza en mayor medida a la derecha. Y que no se ha dejado de lado, potenciado en los últimos años por la izquierda que ha representado Podemos.

¿Tercera España?

¿Lecciones? Lo que propone Floriano es que se abandone el sectarismo. Lo hubo, en las dos partes, en la izquierda, como señala el diputado del PP, pero en los próximos años se debería superar el encono actual, en beneficio del conjunto de españoles. ¿Y que ángulo toma en su novela? Floriano exlica, a partir de la evocación de un relato de corte familiar, --donde las mujeres adquieren un protagonismo singular por su capacidad para redimirse del pasado– una lectura de época del Madrid del Frente Popular. 

Floriano regresa a través de la ficción a 1936 con el ánimo de subrayar que es la moderación, en vez del extremismo, la única fórmula que puede permitir a España conjurar los fantasmas de su propio pasado y construir un futuro sin exclusiones, donde el resentimiento no sea la semilla de nuevas calamidades sociales. Lo que apunta Floriano es a una 'tercera España' que también, en los peores momentos del conflicto, tuvo a importantes representantes. A aquellos españoles que buscaron un consenso, que no quisieron caer en los extremismos, de un lado y de otro, es a los que apela ahora Floriano, buscando esa continuidad histórica, y justo cuando los dos bloques ideológicos, identificados en el PP y el PSOE, mantienen un bloqueo notable.