Stanley Kubrick: el maestro de la provocación
Una exposición en el Círculo de Bellas Artes de Madrid nos sumerge en el extraordinario universo de uno de los directores más relevantes de la historia del cine
26 diciembre, 2021 00:00La mayoría de las películas de Stanley Kubrick oscilan entre el bien y el mal. Sus obras son pura provocación revestida de entretenimiento que desafían al espectador a enfrentarse a sus más tenebrosos dilemas. Su trayectoria está plagada de títulos imprescindibles que conforman un legado tan brillante como controvertido.
Escribía Anthony Burgess en su novela La naranja mecánica que “el ser humano está dotado de libre albedrío, y puede elegir entre el bien y el mal. Si solo puede actuar bien o solo puede actuar mal, no será más que una naranja mecánica”. El director basó en este libro una de las películas más controvertidas y disruptivas de la historia del cine. Un perturbador retrato de la maldad extrema que convierte al verdugo en víctima y a las víctimas en crueles verdugos. Muchos fueron los que le acusaron de provocar una apoteósica espiral de violencia a consecuencia del brutal comportamiento de Alex DeLarge y su pandilla de drugos. Tal fue el revuelo que tres años después de su estreno, y pese a el éxito de taquilla, él mismo pidió su retirada de las salas de cine británicas sobrepasado por los acontecimientos y por las constantes amenazas de muerte a su familia.
Un director fetiche
Coincidiendo con el 50 aniversario del estreno mundial de La naranja mecánica, el Círculo de Bellas Artes de Madrid inaugura “Stanley Kubrick. The Exhibition”, una gran exposición internacional sobre el desaparecido cineasta y su influyente filmografía. La efeméride ha servido además como marco para el lanzamiento del documental La naranja prohibida, una producción original de TCM dirigida por el realizador Pedro González Bermúdez, que reconstruye los acontecimientos acaecidos durante el polémico estreno de la película en la vigésima edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid en 1975.
Hoy está considerado un director de culto y sus películas continúan provocando al público. Su personalísima obra cinematográfica está considerada como uno de los referentes culturales más importantes del siglo XX. Y continúa siéndolo. Basta repasar su filmografía para constatar que sus producciones nos siguen obsesionando. Sus icónicos metrajes han dejado grabado en nuestra retina un sinfín de momentos imborrables e intimidatorios, si no, recuerden la salvaje secuencia de La naranja mecánica cuando el actor Malcolm McDowell tararea “singing in the rain” mientras agreden brutalmente a un matrimonio; a las siniestras gemelas de El resplandor al final de un pasillo llamando al pequeño Danny; el despiadado comportamiento del temible sargento Hartman de La chaqueta metálica y la melosa voz de Hall 9000, la rebelde computadora de 2001. Una odisea del espacio.
Una inmersión en el universo Kubrick
“La muestra propone un recorrido que activa la capacidad de sorpresa: cómo sería adentrarse en el cerebro del director y descubrir las claves de sus obra cinematográfica”, explican los organizadores. Con tal fin han reunido una cuidada selección de más de 600 piezas entre fotografías, cartas, cuadernos de notas, cámaras, maquetas, atrezo, ilustraciones, storyboards, vestuario y guiones, objetos que nos ayudarán a entender cómo era el proceso creativo del genial director.
También se mostrará material audiovisual excepcional como la emblemática elipsis temporal de 2001. Una odisea del espacio, una de las más sugestivas de la historia del cine; secuencias censuradas como la de los caracoles y las ostras de Espartaco y escenas míticas de sus largometrajes como el coronel Dax recorriendo las trincheras en Senderos de gloria.
Objetos de culto
Se mostrarán además algunos de los objetos más emblemáticos de su carrera. Los afortunados visitantes podrán contemplar con sus propios ojos decenas de piezas entre las que destacan el disfraz de simio de 2001. Una odisea del espacio, la silla del director, el vestuario y la mesa del Korova Milk Bar de La naranja mecánica, la máquina de escribir de Jack Nicholson y los vestidos de las siniestras gemelas de El resplandor y la capa que cubría al doctor Bill Harford en la icónica escena de la orgía en Eyes Wide Shut, su último trabajo protagonizado por Tom Cruise y Nicole Kidman en 1999.
“Stanley Kubrick. The Exhibition” recorre toda su trayectoria artística, desde sus inicios como fotógrafo en la revista Look; la realización de sus primeros cortometrajes y documentales; las primeras películas como El beso del asesino (1955), Atraco perfecto (1956), Senderos de gloria (1957) y Espartaco (1960), hasta las grandes obras maestras que fueron tejiendo su fama y prestigio: Lolita (1962), 2001. Una odisea del espacio (1968), Barry Lyndon (1975) y El resplandor (1980).