Georgina Rodríguez se ha convertido en la auténtica protagonista del festival cinematográfico de Canes (Francia). La maniquí ha eclipsado en la red carpet con más pedigrí de la costa azul con un diseño firmado por Jean-Paul Gaultier de la temporada de primavera-verano 2010.
Sin Cristiano Ronaldo, la jacetana acaparó todos los flashes con un vestido vintage de la maison francesa en color marrón café de clara inspiración romana con abertura lateral en la pierna derecha, al más puro estilo Angelina Jolie.
Un diseño de Jean-Paul Gaultier
Y es que el outfit de alta costura no dejó indiferente a nadie. Culpa de ello la tienen los detalles en cuero en el mismo tono que integraba. Para la ocasión, Georgina complementó su estilismo con un sencillo recogido. Y es que por imposible que parezca, la modelo apostó por “el menos es más”. Una larga coleta efecto mojado fue el peinado escogido por Rodríguez para asistir a la fiesta del celuloide.
El broche de oro del look de la empresaria lo ponían unas sandalias en color plateado de vertiginoso y finísimo tacón de 15 centímetros, así como unos enormes pendientes repletos de diamantes. Sin embargo, lo que más llamó la atención de los paparazzi fueron los anillos que lucía la prometida del futbolista luso en su dedo anular.
¿Boda a la vista?
Uno de ellos, valorado en más de 600.000 euros, que no hizo más que despertar nuevamente los rumores que apuntan a que la boda entre la jacetana y el astro del balón podría estar a la vuelta de la esquina. Tal y como era de prever, la asistencia de la influencer en Canes ha sido de lo más comentado en las redes sociales.
De hecho, fue ella misma quien anunció su llegada a tan célebre evento con un espectacular posado en Instagram. “Yes we cannes”, escribió la empresaria. En cuestión de horas, más de 1,2 millones de personas han caído rendidas a los pies de la maniquí y han hecho muestra de su agrado inundando de corazoncitos rojos la publicación. No es para menos.