Tributo a la bata: homenaje a la generación de nuestras abuelas
La fotógrafa barcelonesa Lucía Herrero ensalza a las mujeres mayores que llevan trabajando toda su vida para los demás sin reconocimiento
18 agosto, 2020 00:00La fotógrafa barcelonesa Lucía Herrero rinde homenaje a la bata en una serie de fotografías que muestran esta prenda como pieza que define a toda una generación de mujeres, aquellas abuelas regidas por normas sociales muy patriarcales que no han dejado de trabajar para los demás, pero que nunca han recibido un reconocimiento a su altura.
La bata se alza en las fotografías de Herrero como un símbolo de esta mujer “a punto de extinguirse”. Esta prenda se muestra como un “uniforme de trabajo” que estas mujeres se calzan nada más despertarse y no se quitan hasta que no han fregado el último plato de la cena. “En realidad no es tributo a la bata en sí, sino a la mujer que la lleva”, aclara la artista.
¿Por qué la bata?
La bata actúa como punto de partida del estudio de Herrero, que analiza a través de esta prenda tradicional las cuestiones de género, los cambios sociopolíticos y los paisajes humanos en los que se mueven sus protagonistas.
“Para ellas es un uniforme de trabajo, llevan lo que les tocó llevar y se acabará cuando esta mujer desaparezca”, explica la artista.
Cambio social
Sus hijas, nacidas entre los 40 y los 60, ya no la llevan porque “han tenido otras oportunidades”, subraya Herrero.
“Estas mujeres son la última generación de un cambio social que ha afectado tanto a hombres como a mujeres considerablemente”, puntualiza.
Una generación que va a desaparecer
“Ellas son la matriarca en una sociedad fuertemente patriarcal. Criadas para cuidar de su familia, rara vez tuvieron la oportunidad de siquiera pensar en sus propios sueños”, argumenta Herrero.
En palabras de la fotógrafa, “hablamos de un grupo poco representado y poco apreciado”, razón por la que ha decidido “darle el homenaje que se merece”. “Para improvisar un camino hacia delante hay que mirar hacia atrás, saber de donde venimos”, constata la fotógrafa, quien lamenta que “no hay una estatua de estas mujeres en ninguna rotonda”.
Reflexión
Según la artista, “hay cosas muy valiosas de estas mujeres que podemos conservar y otras de las que nos tenemos que deshacer”.
“Con estas fotografías pongo en bandeja una reflexión sobre el tema, dotándolo de humor y dignidad a una cotidianeidad que a veces no valoramos”, sentencia Herrero, para quien este trabajo “no se hace desde el enfado, ni lleva implícita una denuncia”.
Retratadas en su "hábitat"
Las protagonistas de la serie, iniciada en 2015 pero todavía sin acabar, han sido retratadas en Villarmienzo (Palencia) y en los alrededores de Lugo. “Estas sesiones de fotos son una aventura creativa donde las mujeres entran en un estado de alegría sin siquiera darse cuenta”, asegura Herrero, que toma las fotografías en los pueblos, casas y lugares de trabajo de sus protagonistas.
La fotógrafa señala que con los shootings se crea “una zona mágica donde las mujeres con bata se sienten libres de expresar su locura creativa” y pueden “romper sus fuertes rutinas mentales y de tiempo”.
Crowdfunding
A Lucía Herrero le quedan muchas mujeres con bata que retratar, tanto a nivel estatal como internacional. “Portugal, Italia, Grecia o Polonia son lugares donde me gustaría hacer fotos”, concreta la artista, quien ve en las mujeres mayores del sur y el este de Europa un patrón similar.
Para financiar este proyecto ha iniciado un crowdfunding, a través del cual sus seguidores pueden comprar fotografías firmadas por 50€.
Antropología fantástica
Antropología fantástica es el nombre con el que Lucía Herrero ha bautizado su estilo fotográfico: retratos que unen el análisis sociológico con el humor y la teatralidad como puerta de entrada.
“Cada vez que hago un proyecto, analizo sociológicamente una parte del ser humano al mismo tiempo que pongo el foco en un lugar un poco inesperado, en este caso en la bata”, concluye la artista.