Ada Colau busca cómo extender su legado a la ciudad de Barcelona independientemente de si continúa al frente de su alcaldía o no. A menos de 50 días para las elecciones municipales, el Ayuntamiento de Barcelona presenta un proyecto de tres nuevas zonas restringidas al tráfico --las denominadas superilles-- en el Eixample y en Sant Gervasi.
Las restricciones del paso de los vehículos afectaría a un total de 60.000 metros cuadrados que se destinarían al uso público en el entorno de la calle Girona, el Espai Germanetes de Consell de Cent y en Sant Gervasi. El proyecto, además, no descarta que estas tres superilles acaben unidas mediante paseos "verdes", es decir, con zonas peatonales arboladas.
Obras en 2020
La encargada de presentar este proyecto ha sido Janet Sanz, la teniente de alcalde de Urbanismo del equipo de Colau, que ha fijado el inicio de las obras para 2020, aunque todo dependerá del resultado de los comicios locales. De este modo, la ejecución del plan quedará en manos del próximo equipo que se coloque al frente del consistorio.
Por su parte, Colau ha dejado claro que, de renovar mandato, continuarán extendiendo el modelo de las superilles a otras grandes arterias de la ciudad como la avenida Diagonal, la Meridiana y La Rambla.
Reestructuración del tráfico
En lo que se refiere a la calle Girona, la superilla se ubicará entre la ronda de Sant Pere y Còrsega, y la calle Roger de Llúria y el passeig de Sant Joan. El objetivo es reacondicionar el espacio para reducir el tráfico a los vehículos con destino a espacios del entorno y se construirá un carril bici en la calle Bruc.
La segunda gran manzana, ubicada en la izquierda del Eixample, también conllevará la reestructuración de las calles Borrell y Consell de Cent. Se construirá un nuevo carril bici en Aragó, entre Tarragona y la avenida Roma, y se prevé recuperar 37.706 metros cuadrados que se quitarán del tráfico para dedicarlos al espacio vecinal y la implantación de árboles y zonas verdes, según el consistorio.
100.000 metros cuadrados liberados
Por último, la superilla Sant Gervasi, la más pequeña de las tres, se colocará entre las calles de Balmes, Mandri, passeig de la Bonanova y ronda del General Mitre. No obstante, el problema este espacio será reacondicionar el tráfico en una zona por la que circulan 2.500 vehículos de media cada día. El Ayuntamiento de Barcelona prevé ganar 9.032 metros cuadrados y eliminar los atajos de los coches con destino a la ronda de Dalt.
Sanz ha hecho hincapié en las cinco superilles que ya se han impulsado durante el mandato de Colau, que han liberado 100.00 metros cuadrados de espacio público, el equivalente a 10 manzanas del Eixample. Estas se encuentran en Poblenou, Horta, Sant Antoni, Hostafrancs y Les Corts. El consistorio apuesta por crear una vía de espacios verdes que permita unir unas con otras de cara a un segundo mandato.