El emblemático restaurante catalán que enamoró a Lamine Yamal: cocina mediterránea con bonitas vistas al mar

Cataluña es reconocida en parte por su gastronomía. También es cuna de grandes chefs que mantienen la esencia de la cocina tradicional con toque vanguardista. Gracias a ello y a mantener la tradición dentro de los fogones, ha conseguido situarse en el mapa gastronómico internacional.

En la comunidad hay varios platos típicos que destacan como Pa amb Tomàquet, la salsa Romesco o los Calçots, entre otros, son algunos de los más sonados para los turistas que vienen a probar. Lo cierto es que en la ciudad condal puedes degustar mucho más como mariscadas y paellas frente al mar.

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Lamine Yamal, la estrella del FC Barcelona, es una figura icónica en el mundo del fútbol. Su historia está marcada por sus raíces y orgulloso de su barrio del que viene, donde comenzó a dar sus primeros toques con el balón.  

No obstante, al joven blaugrana también le gusta disfrutar de su familia y con sus amigos, así como de comer en los mejores restaurantes de la ciudad condal. Tanto es así, que Yamal se ha dejado ver por algunos de ellos, entre los que destaca una marisquería de toda la vida.

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Un lugar emblemático

Concretamente, se trata del emblemático restaurante de La Barceloneta, Restaurante Salamanca, que lleva más de 50 años a pie del cañón. Destaca por su exquisita cocina mediterránea, en la que destaca sus famosas paellas, jamones de Salamanca, y el mejor marisco y pescado seleccionado a diario en la lonja del puerto de Barcelona.

Un lugar que no defraudará y cuya filosofía está en “la exigencia en la Selección de los Mejores Productos Frescos, nuestra tradición de atender a los clientes en todo momento como a nosotros nos gustaría ser tratados, y la extraordinaria ubicación del Restaurante en plena Barceloneta, frente a la playa, nos han hecho acreedores de la confianza de los Barceloneses y de los visitantes asiduos de la ciudad”.

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Ubicado en la Barceloneta, es uno de los más icónicos de la costa catalana. Concretamente, en la calle de Pepe Rubianes número 34. Su ambiente acogedor y familiar, junto con su excelente servicio, hacen que cada visita sea una experiencia memorable. Es un lugar donde se respira tradición y donde cada detalle está cuidado al máximo para ofrecer a los clientes una experiencia gastronómica única.

Más de 50 años de historia

El restaurante abrió sus puertas en 1969 de las manos de Silvestre Sánchez, que adquirió el bar llamado “Can Rosith”. Como suele suceder, los inicios no fueron fáciles, hubo que conseguir financiación para reformar el antiguo local, tener liquidez para comprar las mercaderías y pagar a los proveedores, etc.

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Pero Silvestre contando con el incondicional apoyo de toda su familia, y sobre todo de su mujer Lorenza González, y de su hermano Modesto Sánchez y sumando entre todos un enorme esfuerzo, ilusión y ganas de trabajar, no se arredró ante la incertidumbre y se lanzó a escribir la página en blanco de la historia del nuevo restaurante. Tras concluir la reforma inicial, “Can Rosith” paso a llamarse Restaurante Salamanca en recuerdo a la tierra de origen de Silvestre.