La bebida alcohólica valenciana más dulce y desconocida: se utiliza en una tradicional fiesta catalana

Las bebidas alcohólicas forman parte importante de muchas culturas del mundo y, muchas veces, se asocian con momentos especiales, celebraciones o, simplemente, con el disfrute de una buena conversación. Vinos, cervezas, cócteles, licores… todos tienen su encanto y su propio perfil de sabores, aromas y sensaciones. No hay nada como disfrutar de un buen vino en una cena con amigos o refrescarse con una cerveza en un día caluroso.

Sin embargo, es fundamental recordar que el consumo de alcohol debe ser siempre con moderación. Hemos de recordar que tiene efectos en nuestro cuerpo y en nuestra mente que, si no se gestionan adecuadamente, pueden llevar a consecuencias negativas. El exceso de alcohol puede afectar a nuestra salud física y emocional, a nuestras relaciones y a nuestra capacidad para tomar decisiones.

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La bebida catalana

La barreja es una bebida consistente con una mezcla de aguardiente y vino. La más popular es aquella que se elabora a base de moscatel y anís, que se mezcla a partes iguales, directamente, en un vaso pequeño. Es una bebida típica valenciana, tomándose, en su día, para las frías mañanas de la recogida de la naranja.

Botella de barreja WIKIPEDIA

También, se puede preparar con moscatel y brandy, vino rancio y anís o mistela. No existe acuerdo alguno de si el anís debe ser seco o dulce. Eso sí, se solía beber antes de desayunar, especialmente, para hacer pasar el frío. Este acompañamiento del primer café de la mañana fue incorporado por los trabajadores inmigrantes valencianos que solían ser temporeros de la naranja. Ahora, no obstante, está siendo sustituida por el carajillo o el trifásico.

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Barreja en la Patum de Berga

Esta bebida, sobre todo en la versión elaborada con moscatel y anís, es una de las bebidas típicas de la Patum de Berga: una celebración tradicional que se realiza durante las fiestas del Corpus Christi en esta localidad catalana. 

Tradicionalmente, tanto particulares como establecimientos de restauración, elaboraban su propia barreja, pero en el año 2010, el Patronato de la Patum reconoció una oficial fabricada por una destilería local. Ahora la venta de este producto ayuda a financiar la fiesta.​

La barreja se solía servir muy fría, pero en el año 1989, el Ayuntamiento de Berga ordenó que se sirviera a temperatura ambiente, ya que la frescura disimula el contenido de alcohol de la bebida.

La Patum de Berga CATALUNYA TURISME