Jaume Raventós
En los últimos días, han salido a la luz algunas informaciones que señalan algunas supuestas deficiencias en el modelo de seguridad privada del Hospital del Mar de Barcelona. El centro sanitario que atiende a la parte sudeste de la ciudad ha levantado las sospechas de la Oficina Antifraude de Cataluña.
Según ha informado Crónica Global, al cuerpo de seguridad del hospital le falta un jefe. El artículo 96 del Reglamento de Seguridad Privada establece que los centros con 24 o más vigilantes deben contar con una dirección; en este caso hay 35 efectivos sin nadie que los coordine. Además, el contrato de licitación contempla la contratación de cuatro personas más, que tampoco se ha cumplido.
Al tiempo que este medio alertaba de ello, ha trascendido que uno de los vigilantes fue acusado de agredir a una persona trans con insultos y empujones. Este fin de semana el hospital presenció una manifestación en sus puertas de Red Trans y La Capçalera denunciando el trato recibido por la víctima. El acusado ha sido apartado del servicio y están a la espera de la resolución de la justicia.
Dada la situación actual, el gerente del Consorci Mar Parc de Salut, Jaume Raventós, haría bien en trabajar para revertir sendas polémicas y garantizar el mejor servicio posible de seguridad privada.