Enric Martínez, de Aetrans, en una denuncia de la patronal a la CNMC
Un expolítico y alto cargo del PP catalán que devino tránsfuga ha roto el sector de las ambulancias al impugnar uno de los grandes contratos pendientes del presidente valenciano Carlos Mazón. La historia podría parecer rocambolesca, pero ha sucedido.
Ha ocurrido en el seno de la patronal Aetrans, de transporte sanitario, donde hay una auténtica rebelión de empresas contra la gestión de la cúpula, donde el exconcejal y ex alto cargo delegado Enric Martínez detenta el cargo de vicepresidente, por recurrir la macrolicitación de hemodiálisis de la Comunidad Valenciana.
Los asociados acusan a la junta de opacidad y falta de transparencia para poder impugnar el concurso público sin oposición interna. Martínez, a preguntas de este medio, calla.
El asunto no ayuda a dar confianza al paciente en un sector clave como el transporte de enfermos. Las empresas y patronales tienen todo el derecho a impugnar licitaciones públicas si las ven defectuosas o lesivas para el interés general.
Pero en todo caso, deben hacer un esfuerzo extra de transparencia y humildad. Porque de lo contrario se disparan los rumores de que las organizaciones empresariales sirven a los intereses de algunos. Y ello es muy mal negocio para los entes corporativos, que juegan un rol vital en la representación empresarial y la negociación con los sindicatos y administraciones.