Alberto Torrejón, director general de Wakeful
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Wakeful Seguretat acumula una nueva controversia en su historial. La contratista estrella de los ayuntamientos catalanes en seguridad privada ha sido señalada en esta ocasión por haber incumplido, presuntamente, el contrato público para prestar sus servicios en diversos eventos organizados por el Ayuntamiento de Santa Perpètua de Mogoda.
Este consistorio barcelonés denuncia en un comunicado que Wakeful se ausentó hasta tres veces en la fiesta mayor del municipio del pasado verano. Un trabajo que tenía como cometido reforzar las tareas seguridad que ya ejercen los cuerpos policiales en sitios con mucha afluencia de público.
A ello se le suma otro episodio reciente. Y es que se trata de la misma empresa que este verano dio empleo a algunos jóvenes con antecedentes policiales para trabajar como "agentes cívicos" en el Ayuntamiento de Lloret de Mar (Girona). Este medio desveló en su día que dicho consistorio rescindió de forma cautelar el contrato con la empresa Stride Services por haber empleado a dos trabajadores de Wakeful que sumaban hasta 30 detenciones. Uno de ellos, incluso, un arresto con relación con un homicidio.
La compañía, sobre la que presuntamente pesa una deuda de casi 1,3 millones de euros a Hacienda, se hizo en Barcelona ciudad con la concesión de los servicios de seguridad privada en eventos como las fiestas de La Mercè 2024, la celebración de Fin de Año, la cabalgata de los Reyes Magos y el tradicional pesebre de la plaza Sant Jaume. Una responsabilidad que debería obligar a Wakeful a redoblar sus esfuerzos para que nunca más se repitan episodios como los de Santa Perpètua y Lloret.
