Gerard Piqué
Gerard Piqué parece tener algún tipo de filia o fobia con las zonas de aparcamiento y la conducción. La última historia protagonizada por el exfutbolista del Barça y hoy empresario le sitúa en un palacete que adquirió como inversión hace años junto a su expareja Shakira en la zona alta de Barcelona.
Por razones que solo él puede responder, no paga la tasa de vado de ese inmueble, lo que ha llevado al Ayuntamiento de Barcelona a imponerle una sanción ejemplar (y antiestética para el vecindario): tres bolardos en la puerta para que no pueda aparcar. Y la cosa podría no pasar de anécdota o descuido si no fuese por el historial del personaje.
Al margen de sus salidas de tono como futbolista, Piqué ha sido noticia en otros momentos por situaciones al volante. Sin ir más lejos, en 2022 aparcó su Porsche en una zona prohibida, como publicó este medio. En 2018, pagó una multa por conducir sin carné. Por no hablar de algunos encontronazos con fotógrafos en el asfalto.