David Mascort
Las zonas de bajas emisiones, otra carpeta que se le acumula al Departamento de Acción Climática, dirigido por el conseller David Mascort, y que todo apunta a que tardará en resolverse, a pesar de que tenía que estar lista antes del inicio del nuevo año.
Una vez más, el Govern, que se llena la boca de los retos que hay que afrontar (se ciñe a objetivos que a nadie interesan), deja los problemas reales en punto muerto. Porque el asunto de la contaminación es preocupante, y va tarde. Mucho. Como la gestión de la sequía.
En este caso de las zonas de bajas emisiones, además, no es que el proyecto vaya con retraso, es que va camino de salir adelante sin consultar con el territorio, a sabiendas de que cada ciudad tiene unas peculiaridades, y de que no se puede regular esta cuestión igual para todo el mundo. De todos modos, con las elecciones catalanas a la vuelta de la esquina, poco se puede esperar al respecto.