Pilar Alegría
La nueva selectividad sigue dando tumbos entre quejas de filólogos y escritores (ya superadas) y procesos electorales que dilatan su puesta en marcha. Es esta falta de Gobierno en España, de hecho, la que ha llevado a la ministra de Educación en funciones, Pilar Alegría, a retrasar un año la renovada prueba, puesto que considera que es mejor esperar a generar más polémica e incertidumbre en torno a los exámenes de acceso a la universidad.