Un hombre de Estado (español)
Entre los miles de ciudadanos españoles que hoy irán a votar al PSOE hay un personaje cuya elección electoral resulta cuando menos curiosa, pues escenifica una evolución política rara no, lo siguiente. Me refiero a Alfons López Tena (Sagunto, 1957), notario, exmilitante de CDC, inventor del partido visto y no visto Solidaritat Catalana y fundador, a medias con Héctor López Bofill, ese buen burgués que siempre está urgiendo a los demás a tomar las armas por la independencia del terruño, del Cercle d´Estudis Soberanistes (que no sé si sigue en activo o si ha pasado a mejor vida). Como si eso no fuera suficiente para describir a López Tena como un indepe de pro, hemos de recordar que fue quien se inventó el exitoso eslogan "¡España nos roba!" ¿Cómo es posible que un sujeto con semejante trayectoria fulgurante dentro del lazismo haya optado por votar al PSOE en unas elecciones generales?
Bueno, la verdad es que nuestro hombre lleva cierto tiempo poniendo de vuelta y media a sus antiguos camaradas de (supuesta) lucha. Según él –y no seré yo quien le lleve la contraria-, los catalanes no quieren realmente la independencia y Junts, ERC y la CUP lo han hecho todo fatal y han retrasado la liberación de Cataluña cuatro o cinco décadas, por lo menos. Y él, asegura, se considera un hombre de Estado (español, me temo, ante el destino de su voto). Insiste en que sigue siendo indepe, pero que con los papanatas con los que se ha juntado durante los últimos años no se va a ninguna parte. Y supongo que, a falta de un Estado catalán, el hombre ha decidido conformarse con el Estado español, que no es que sea el colmo de la eficacia y el tronío, pero sí parece algo más serio que lo que bullía en la mente confusa de Mas, Puigdemont y Torra. Tras años ejerciendo de profesional de la intifada catalana, el notario de Sagunto se cisca ahora en el procesismo, dando la razón a quienes decían que siempre había sido, en cualquier circunstancia, un verso suelto.
Eso sostenía mi amigo Jordi Cañas hace unos años, cuando quedaba a comer con un grupito de políticos en el que figuraba López Tena. Ante mi sorpresa, Jordi me contó que el inventor del ¡Espanya ens roba! era un comensal divertidísimo que, cuando llevaba unas copas encima, entretenía a los demás contertulios cantando coplas de Concha Piquer (parece que las bordaba) y otras divas del plumerío patrio. Según Cañas, había dos López Tena: el público, que aseguraba sin rubor que España nos robaba, y el privado, que brillaba con luz propia por su gracejo sin igual y sus conmovedoras versiones de Ojos verdes o Te lo juro yo.
Gracias a su última evolución política, el López Tena indepe y el López Tena coplero parecen haber optado por fusionarse. Y algo me dice que aún podemos esperar de él más honesta diversión a partir de ahora. Como dicen los gringos, Wait and see.