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El fiscal Pedro Ariche ha reprendido al exconseller de Interior Miquel Buch y al sargento de Mossos d'Esquadra Lluís Escolà, procesados por delitos de malversación agravada y prevariación, por ensuciar el nombre cuerpo policial catalán. Denuncia que ambos han causado un "daño reputacional" a los Mossos d'Esquadra al permitir que el sargento –“un buen patriota”, según Puigdemont— le hiciera de escolta al expresidente de la Generalitat tras fugarse de la justicia.