El pataleo de De Felipe
María Helena de Felipe, la expresidenta de la Fepime, está que trina. Sus movimientos políticos en el seno de la patronal catalana, Foment del Treball, han ido de mal en peor. Perdió su oportunidad de convertirse en la número dos de Josep Sánchez Llibre, tentada por la posibilidad de ser su rival de la mano de Joaquim Gay de Montellà. Fracasada en su intento, Helena de Felipe se aprestó a atrincherarse en Fepime. El segundo intento acabó en un rotundo fracaso. Sánchez Llibre consiguió, con el apoyo unánime de Fepime y de Foment, poner fin al contencioso de más de 12 años con la Pimec. Tras este acuerdo, el equipo del presidente está trabajando en dar a la organización de las pequeñas y medianas empresas de la mayor patronal catalana de un nuevo impulso para recuperar el terreno perdido y la estabilidad económica.
Con escasos predicamentos en Cataluña, De Felipe está presentándose como víctima en Cepime. En la última reunión de los máximos órganos de la organización de la CEOE, la empresaria acusó a Sánchez Llibre de “entregarse y bajarse los pantalones” a los independentistas de Pimec. Sus palabras causaron estupor en Cepyme (la patronal de pequeñas empresas de ámbito nacional) y malestar en Foment del Treball y en la propia Fepime. “Son sus últimos coletazos”, afirman fuentes de la patronal que no dudan que su adiós es cuestión de tiempo, y no muy largo porque “está disfrutando de su derecho al pataleo, pero sin apoyos”.