¿Dónde está ICV?
Ada Colau, la alcaldesa de Barcelona, forzó la máquina para que Xavier Domènech y sus comunes lideraran la lista electoral que ocupa el espacio de la genuina izquierda catalana. Para conseguir su objetivo no dudó en trinchar a Iniciativa per Catalunya, el socio de su coalición mejor organizado en el territorio, dejando fuera a sus principales líderes. De hecho, con las encuestas en la mano sólo un miembro de Iniciativa puede llegar a ser diputado en la nueva legislatura. Las tensiones en el seno de la coalición en la antesala del trompazo electoral son manifiestas y los líderes de ICV velan armas anunciando que “el día 22 hablaremos”.
En este escenario envenenado, Colau enfundándose en el disfraz de líder carismático ha dejado solo a Domènech. Sus apariciones son esporádicas y piensa más en sus municipales que en las autonómicas. El fracaso será de Domènech, no suyo, parece ser la máxima. Su aparición en Sálvame se enmarca en este esfuerzo como alcaldable. Del desaguisado de Catalunya en Comú no quiere saber nada de nada, aunque en sus filas “amenaza tormenta”.