Joan Laporta heredó un Barça con los ingresos mermados por el coronavirus y el gasto disparado. El equipo de fútbol también estaba con la autoestima muy baja, pero el de baloncesto vivía días ilusionantes, con Saras Jasikevicius y Nikola Mirotic como grandes referentes. Cuatro años después, la sección más costosa está en crisis, con Joan Peñarroya contra las cuerdas y un solo base disponible en la plantilla. El máximo dirigente aparca la toma de decisiones por falta de dinero, pero activará la gran revolución en verano. El segundo cambio de rumbo en dos años, tras fracasar el primer proyecto liderado por Roger Grimau.
El baloncesto es un problema permanente para Laporta. Ya lo fue en su primer mandato. Entre 2003 y 2010. Entonces tuvo dos crisis. La receta para aliviar la primera –despido de Pesic-- no sanó al enfermo. La solución llegó con los fichajes de Joan Creus (despachos) y Xavi Pascual (pista), sustitutos de Zoran Savic y Dusko Ivanovic.
La primera víctima
Casi dos décadas después, el basket es una ruina. El Barça tiene jugadores con mucho talento en su plantilla, pero no es un equipo. La primera víctima será Joan Peñarroya, quien el pasado verano se comprometió por dos temporadas.
Jabari y Peñarroya, en la pista del Gran Canaria
Josep Cubells, directivo responsable del Barça de basket
Laporta quiere más cambios. Josep Cubells, el directivo responsable, seguirá el guion que le indique el presidente. El club quiere iniciar un nuevo proyecto, un cambio de filosofía que pasa por destinar más recursos a la formación. En los últimos 10 años no se ha consolidado ningún jugador de la cantera en el primer equipo. Dame Sarr, el único canterano en la plantilla actual, es un escolta italiano con muy poco protagonismo y acaba contrato en junio.
El balonmano
Xavier O’Callaghan, nuevo director de deportes profesionales, tiene el reto de poner orden y unificar criterios en las secciones. En el equipo de balonmano, por ejemplo, habrá muchos cambios. Ludo Fàbregas, Viktor Hallgrimsson, Dani Fernández, Seif Eldeeraa, Ian Barrufet y Djorde Cikusa serán las novedades de un Barça que tendrá algunas bajas muy sensibles como las de Pérez de Vargas, Ariño, Wanne, Petrus y Melvyn Richardson.
Xavier O'Callaghan, nuevo director de las secciones profesionales del Barça
Jugador del Barça de balonmano entre 1986 y 2005, Oca siempre fue una persona muy discreta. No era un jugador con mucho talento, pero era imprescindible para Valero Rivera. Ahora, como director de las secciones profesionales, necesitará su talante tranquilo para tomar decisiones impopulares en el equipo de baloncesto.
Metu y el Real Madrid
Cinco jugadores del Barça acaban contrato en junio. El pasado verano, el club solo ofreció un año a Punter, Anderson, Metu y Fall por motivos fiscales (la retención en los primeros meses es del 24% y luego sube hasta el 47%) y el club quiere renovar a los tres primeros. Sobre todo, a Punter y Metu. El primero ya ha expresado su deseo de seguir en Barcelona. El segundo, en cambio, tiene dudas.
La reacción de Kevin Punter durante el partido del Barça contra el Olympiacos
Chimezie Metu defiende a Kahudi en el Barça de basket-Asvel
Metu tiene un salario relativamente bajo: apenas 850.000 euros brutos. El ala-pívot estadounidense, con ofertas de otros clubes, aspira a un contrato mejor. Quiere, como mínimo, triplicar su ficha y Juan Carlos Navarro, actual manager general, sabe que ya ha sido tentado por el Real Madrid.
Navarro, tocado
O’Callaghan deberá abordar el futuro de Metu y otros jugadores. También, el de Navarro. Con un contrato vitalicio, la Bomba cambió la pista por los despachos tras su retirada, en 2018. Ahora es el máximo ejecutivo de la sección, pero en el Palau tiene muchos detractores.
Juan Carlos Navarro, mánager general del Barça de basket, en un acto del club
“No sirve como ejecutivo”, aseguran en el Palau. “Hubiera encajado mejor en el baloncesto formativo y es una pena que un mito del Barça sea ahora tan criticado”, sostienen en el club.
El presupuesto
El gran problema de O’Callaghan será económico. Tiene las ideas muy claras, pero deberá ajustarse a un presupuesto restrictivo. El coste de la plantilla actual asciende a 31,5 millones de euros y no se espera un gran incremento. Tal vez llegue la hora de tomar decisiones drásticas para solucionar algunos errores de dimensiones siderales, como la ficha de Willy Hernangómez. El pívot madrileño, inédito en muchos partidos por bajo rendimiento, cobra 4,5 millones de euros anuales.
Willy Hernangómez atrapa un rebote en el Barça de basket-Maccabi de Tel Aviv
El Barça de basket iniciará un nuevo proyecto. Sin Peñarroya y, posiblemente, sin Navarro. La búsqueda de un nuevo director deportivo y un técnico fiable serán los grandes retos de O’Callaghan y Cubells. Laporta ya sabe que su poder de seducción fracasó los dos últimos veranos con su deseo de contratar a Xavi Pascual como entrenador. Las diferencias económicas fueron importantes.
El futuro Palau
La renovación del Barça de basket será compleja y difícil a corto plazo, pero Laporta sabe que necesita luces largas. Su plan para evitar que la sección sea una sangría económica pasan por lograr nuevos patrocinadores y duplicar el número de abonados con la construcción del nuevo Palau Blaugrana con capacidad para 15.000 espectadores. El problema, otro más, es que no ha encontrado un inversor que asumiera su construcción a cambio de su explotación y el baloncesto barcelonista vive días duros, sin un rumbo fijo.
El diseño del nuevo Palau Blaugrana, el futuro pabellón del Barça