El Barça de basket suma dos victorias en dos partidos en la Liga ACB. En la Euroliga, en cambio, perdió en Kaunas. Joan Peñarroya tiene un equipo mucho más compensado y físico que Roger Grimau, pero hay problemas que siguen atormentando al equipo azulgrana. El más preocupante, el bajo rendimiento de Tomas Satoransky.
Satoransky, de 32 años, debería ser el gran líder del Barça. Base de 2,01 metros, regresó al Palau hace dos años para sustituir a Nick Calathes. Su rendimiento siempre ha sido inferior al esperado y Peñarroya busca soluciones.
Granada y Lleida
El Barça, hoy, no tiene un director de juego fiable. Satoransky no ha anotado ningún punto en la Liga ACB. En los partidos contra el Granada y el Lleida, aportó muy poco a un equipo en construcción, con cinco incorporaciones tras un curso pasado decepcionante.
Peñarroya necesita una versión mucho más fiable de Satoransky. Más tranquilo está con Juan Núñez, fichado el pasado verano. El base madrileño, de 20 años, anotó ocho puntos contra el Granada y solo dos contra el Lleida. Es un jugador muy creativo, que arriesga mucho, y todavía está en proceso de adaptación a sus nuevos compañeros.
Tomas Satoransky sube el balón en el Real Madrid-Barça de basket
Juan Núñez ataca el aro contra el Granada
Laprovittola y Punter
La solución de Peñarroya, de momento, pasa por alternar a Laprovittola como escolta y como base, posición en la que también puede jugar Kevin Punter, el fichaje estrella para el ejercicio actual.
Nico Laprovittola lanza un tiro libre ante el Zalgiris en Euroliga
Kevin Punter, con el balón ante el base canadiense del Real Madrid, Xavier Rathan-Mayes
Peñarroya quiere un Barça más equilibrado y contundente. Necesita un buen director de juego, pero no todo son malas noticias. En el Palau están encantado con la transformación de Joel Parra, fichado hace un año del Joventut. Tras un primer curso decepcionante, el alero se ha convertido en un jugador muy importante en la rotación. En los primeros dos partidos de la Liga ACB ha sumado 32 puntos: 16 contra el Granada y otros 16 en Lleida. Es la otra cara de un Barça con urgencias, obligado a ganar algún título importante.