El FC Barcelona B deja una sensación agridulce contra el Tarazona. El equipo culé ha transmitido esa solidez defensiva que había caracterizado en el ciclo de Rafa Márquez, pero como parte negativa han tenido poca amenaza ofensiva en un amargo empate (1-1) que permite a los jóvenes talentos azulgranas conseguir su primer punto fuera de casa en la Primera RFEF 2024-25.
Ni siquiera el mejor Unai Hernández ha logrado romper la resistencia del rival. El habilidoso atacante ha sido lo mejor del filial del Barça en Tarazona, sobre todo por un par de ocasiones que estuvieron cerca de representar la victoria azulgrana. El problema es que el canterano se ha encontrado con un Diego Fouli que ha protegido su arco con mucha determinación.
Mucha frustración
La SD Tarazona decidió plantear un partido difícil de digerir para el Barça B. La mitad de cancha fue poco accesible para los jugadores culés, especialmente por la poca movilidad en la circulación de balón. Solo Unai marcaba un ritmo diferente en las escasas ocasiones de gol que pudo fabricar el equipo de Albert Sánchez, pero la resistencia de Fouli mantuvo el marcador en cero.
Los últimos minutos fueron de infarto. Unai tuvo una oportunidad de gol tras un fuerte disparo en la frontal del área, aunque nuevamente se encontró con el manotazo del portero rival. La SD Tarazona también inquietó el arco de Yaakobishvili con un tanto que posteriormente fue anulado por fuera de juego. No lograron hacerse daño en los minutos finales, a pesar de la insistencia del Barça B.
A levantar cabeza
Albert Sánchez tiene la misión de levantar al equipo en la próxima jornada y recuperar el trabajo ofensivo. El Barça B jugará nuevamente como visitante en la séptima jornada de la competición, concretamente en casa de Sestao River el próximo 6 de octubre a las 17.00 horas.