No pudo ser. El Barça B no pudo cumplir con el sueño del ascenso a Segunda División. El filial azulgrana, dirigido por Rafa Márquez, cayó derrotado (2-1) en la vuelta de la final contra el Córdoba, que se convierte en el último equipo en subir a la categoría de plata del fútbol español. El jarro de agua fría ha caído sobre el joven equipo culé, que por diferentes errores individuales dejó escapar lo que pudo haber representado una victoria histórica para el club.
Se trata de un cierre amargo de la sobresaliente temporada 2023-24 del Barça B. El curso ha tenido un montón de notas positivas por la irrupción de muchos canteranos que apuntan al primer equipo, aunque culmina con la dura derrota en territorio cordobés. También es una caída que pone dudas sobre la continuidad de Rafa Márquez, que considera otros proyectos más ambiciosos para seguir con su carrera en los banquillos.
Noche de golazos
El Barça B salió con una gigantesca personalidad a ganar el partido en Estadio Nuevo Arcángel. No solo a partir de la energía e intensidad que caracteriza a los de Rafa Márquez, sino también por la velocidad del juego con balón. Esa misma precisión fue lo que permitió que el equipo consiguiera en posición de ventaja a Héctor Fort, que decidió definir la jugada con un espectacular zapatazo al segundo palo tras una carrera impresionante por la banda derecha.
Héctor Fort festeja el gol inicial del Barça B contra el Córdoba
Fue una jugada brillante del filial del FC Barcelona, que se mantuvo persistente en dominar el partido. No dieron apenas espacios para que el Córdoba hiciera daño en ataque. Pero lamentablemente, la mala fortuna no pudo acompañar por completo al conjunto azulgrana, debido a que Alberto Toril logró superar a Marc Vidal con un cabezazo inatajable.
Ese golpe mareó un poco al Barça B. Hubo más pérdidas de balón que transmitieron mucha sensación de peligro, por lo que el descanso representó una oportunidad ideal para que Rafa Márquez cambiara la dinámica del encuentro. El equipo comenzó con un ritmo y precisión envidiable, pero el tanto del empate les hizo perder esa concentración que mostraron en gran parte de la primera mitad.
Otro error clamoroso
El comienzo de la segunda mitad estuvo lejos de ser positivo para el filial. Un grosero error de Marc Vidal en salida permitió al Córdoba recuperar el balón dentro del área, donde volvió a aparecer la figura goleadora de Toril para poner a los suyos por delante en el marcador. Fue un balde de agua fría para los azulgranas, especialmente por las dificultades que mostraron para ser profundos en ataque.
Márquez intentó agitar el árbol con el ingreso de Dani Rodríguez para aportar mayor desequilibrio por las bandas y Ángel Alarcón para sumar otro perfil goleador en los ataques. El Barça B pudo encontrar situaciones de remate ideal, pero los centrales rivales se mantuvieron firmes en cada una de las jugadas del cuadro azulgrana. Fue un muro difícil de superar para el filial, que igualmente no bajó los brazos en búsqueda del gol del empate.
La falta de acierto en el remate fue la sentencia definitiva del Barça B. Insistieron hasta los últimos minutos, pero la imposibilidad de terminar las jugadas mantuvo la ventaja a favor de un Córdoba que se dedicó en el tramo final a encerrarse en el fondo y a despejar la mayoría de acciones. La recompensa no pudo llegar para el equipo de Rafa Márquez, que se despide de la temporada con un trago amargo.