El Barça de basket ganó el clásico del Palau. El equipo azulgrana se impuso al Real Madrid por 85-79 en un partido muy intenso, con muchas alternativas, y con un Ricky Rubio fabuloso, autor de 11 puntos. Con el base de El Masnou, el Barcelona fue más intenso y letal fue su sociedad con Willy Hernangómez. También tuvo su día Nico Laprovittola, autor de 25 puntos. La nota negativa fue, una vez más, el mal partido de Tomas Satoransky.
Satoransky es un jugador con mucho talento. Un base de 32 años que regresó al Barça tras su periplo en la NBA. El suyo fue un fichaje muy celebrado por Joan Laporta y Sarunas Jasikevicius, que prescindió de Calathes en una decisión muy polémica. Y el jugador checo, en un año y medio, sigue sin ser decisivo.
Balance negativo
Con Satoransky en pista, el Barça fue peor que el Real Madrid. Con él, el equipo azulgrana anotó 15 puntos menos que el eterno rival. Anotó tres puntos y solo transformó uno de los tres triples que intentó. También falló los dos tiros de dos. Y en defensa, debería sacar más provecho de su altura: 2,01 metros.
El Barça sigue muy vivo en la Liga ACB y en la Euroliga, pero Roger Grimau necesita una mejor versión de Satoransky. Es una pieza demasiado importante para que chirríe tanto.