El Barça de basket gana y gusta contra el Partizan de Belgrado. Los azulgranas dieron una de sus mejores presentaciones de la temporada (94-76), debido a su enorme dominio en las dos fases del juego. Aunque el máximo anotado del equipo culé fue Nicolás Laprovittola con 17 puntos, se debe resaltar especialmente la noche de Ricky Rubio, que pudo firmar su primera gran noche del curso en la Euroliga.
En este sentido, el base de El Masnou --no fue titular-- pudo aportar su magia en los 16 minutos que estuvo en la pista del Palau Blaugrana. En ese tiempo fue capaz de aportar con siete puntos, seis rebotes y seis asistencias, siendo sus mejores registros desde que volvió al Barça de basket. Su influencia se pudo complementar con los partidazos de Laprovittola (17 puntos) y Willy Hernangómez (15 puntos).
El Barça domina a placer
Los primeros minutos no fueron fáciles para el equipo azulgrana. El Partizan tuvo las ideas mucho más claras, logrando sacar una ventaja en los primeros minutos. Pero fue la intervención de Roger Grimau lo que permitió a sus dirigidos conectarse rápidamente al encuentro. En ese proceso fue clave la presencia de Ricky Rubio, que hizo jugar de maravilla a sus compañeros para tener la ventaja (51-48) al descanso.
A partir del tercer cuarto se inclinó mucho más la balanza hacia el lado del Barça de basket. La magia de Ricky, junto a la brillantez de Laprovittola, permitieron a los culés pisar el acelerador hasta el tramo final del encuentro. Poco a poco se fueron sumando a la fiesta jugadores como Jabari Parker y Rokas Jokubaitis, quienes ayudaron a dar cifras definitivas a la victoria de los locales.
Asentados en la Euroliga
El triunfo del Barça de basket supone una bocanada de aire fresco para Grimau. Por ahora, el conjunto catalán se mantiene firme en la segunda plaza de la Euroliga con un total 20 victorias y nueve derrotas. La reciente contra el Partizas también permita a los azulgranas presionar mucho más al Real Madrid, que sigue en el liderato con 20 triunfos a su favor.
La siguiente jornada para el equipo de Grimau será el próximo 20 de marzo cuando tengan que visitar el feudo del Fenerbahce. Un compromiso que va a exigir mucho a la plantilla culé.