El Barça Femenino es una máquina de ganar partidos. Y títulos. Cuenta con las mejores futbolistas de los últimos años y sus buenos resultados contrastan con algunas tensiones internas en el vestuario y en los despachos, saldados con la marcha de Markel Zubizarreta y la próxima salida de Jonatan Giráldez. En el campo, Aitana Bonmatí es ara la gran estrella. No hace tanto lo era Alexia Putellas.
Aitana y Alexia se respetan, pero no hay mucha química entre ellas. Ambas compiten por ser la mejor y ambas son centrocampistas. Putellas sigue de baja, aunque en los últimos días fue noticia por su convocatoria con la selección española para la Nations League que ganó la Roja.
La convocatoria
Alexia no jugó ni un minuto, pero su convocatoria molestó al Barça. Fue interpretada como un pulso al club. Ella lo niega y su entorno recuerda que nunca puso en riesgo su recuperación.
El Barça y Alexia, mientras, siguen sin resolver la renovación de la futbolista. Las diferencias entre lo que pide la jugadora y lo que ofrece el club son importantes. En el Barcelona insisten en que no pueden aceptar las demandas de Putellas por las restricciones económicas del club. Una renovación muy al alza podría tener un impacto muy negativo en futuras operaciones.
Un gran contrato
Alexia no juega, pero se habla constantemente de ella. Dos veces Balón de Oro, ya tiene 30 años y su futuro es incierto. La futbolista de Mollet aspira, como mínimo, a un gran contrato de dos o tres años. En el Barça, de momento, aguantan el pulso y Aitana espera noticias. Luego le tocará renovar a ella. De momento es menos mediática que Alexia, pero rinde mejor en el campo.