El Barça de basket vive a la sombra del Real Madrid

El Barça de basket compite, pero los recortes del pasado verano castigan a la sección en sus duelos con el Real Madrid. El equipo sigue sin tener un antídoto para frenar a Tavares, y echa de menos el liderazgo de Nikola Mirotic. Roger Grimau apuesta por un baloncesto atractivo, muy ofensivo, pero el grupo blanco tiene más tablas y pegada. La incorporación de Ricky Rubio será una buena noticia para los barcelonista, pero posiblemente será insuficiente para derribar la muralla madridista.

Es el Barça un equipo en construcción. Grimau tiene las ideas claras y su apuesta, discutida en algunos sectores del Palau, es del agrado de Juan Carlos Navarro, el manager general, y de Laporta. El presidente asume que el curso actual es muy complicado tras recortar unos 13 millones el presupuesto de la sección.

Las salidas del Palau

En verano, el Barça prescindió de Sarunas Jasikevicius, quien cobraba 3,5 millones de euros, y ascendió a Roger Grimau, con un salario de 500.000 euros, aproximadamente. También rescindió los contratos de Cory Higgins (3,5 millones) y Mirotic (11 millones) y levantó un nuevo equipo con menos dinero.

Llegaron Joel Parra y Darío Brizuela. El Barça también se ilusionó con Kevin Punter, pero finalmente renovó su contrato por el Partizán. Juancho Hernangómez también le dio calabazas a Navarro, que fichó a su hermano Willy, quien aceptó una oferta de 12,5 millones de euros por tres años. Y faltaba un ala-pívot. El relevo de Mirotic. La solución final fue Jabari Parker, una antigua estrella de la NBA que llevaba un año y medio sin jugar por su maltrecha rodilla.

El factor Tavares

El Real Madrid, mientras, mantuvo la base del equipo que la pasada temporada ganó la Euroliga --y perdió la final de la ACB contra el Barça--. Tavares sigue siendo el dueño bajo los aros. En verano acaba contrato y en la capital temen que se vaya al Panathinaikos, que también aprieta por Hezonja.

Florentino Pérez sabe que será complicado mantener el mismo equipo. Musa también debe renovar, igual que Caseur y los Sergios: Llull y Rodríguez. Parece que ambos seguirán un año más en el Real Madrid. Rudy Fernández, en cambio, podría retirarse.

Las renovaciones se complican

En el Barça, Laporta también espera otro verano movido. No le será fácil retener a Kalinic y Parker, que sueña con regresar a la NBA. Paulí y Da Silva, en cambio, están sentenciados, mientras que Jokubaitis y Nnaji podrían dar el salto a Estados Unidos.

Jabari Parker comanda una jugada del Barça de basket contra el Palencia FCB

En el Palau todavía desconocen los planes de Laporta. No esperan grandes cambios en el presupuesto de la próxima temporada y costará encajar las piezas. El futuro pasa por Jakucionis y Dame Sarr, un base y un escolta con mucho talento. El problema, sin embargo, está en la pintura y la posible marcha de Nnaji no será una buena noticia. La gran sensación de la cantera barcelonista, el joven Mohamed Dabone, que ya mide 2,08 metros y arrasa en sus partidos. Pero solo tiene 12 años. Mientras, el Barça deberá buscar soluciones para tumbar al Real Madrid.