Indignación total en el Barça de basket. El equipo azulgrana no está conforme con la actuación de los árbitros en el clásico de la Euroliga, en donde perdieron (65-64) contra el Real Madrid. El encuentro se definió por pequeños detalles, en especial por las decisiones de los jueces en varios momentos que pudieron haber inclinado la balanza hacia el sector culé. Tras esa situación, el club presentará una queja formal al estamento arbitral.
De acuerdo con la información proporcionada por EFE, los altos mandos de la entidad presentarán una queja formal al estamento arbitral de la Euroliga para manifestar lo que entiende como errores en el arbitraje de los colegiados Ilija Belosevic, Milan Nedovic y Luka Kardum.
La polémica del clásico
En este sentido, la principal queja del Barça de basket se relaciona a Jan Vesely. A falta de 2’48” para el final del primer cuarto y con 6-14 en el marcador, el checo anotó una canasta de tiro lejano que fue el 6-16. Faltaban entonces seis segundos para el final de la posesión cuando anotó el checo, pero el reloj de posesión estaba parado. El Madrid sacó de fondo, cruzó campo y, entonces, la mesa se dio cuenta de que el tiempo de posesión llevaba unos segundos sin moverse. Después de cuatro minutos de deliberaciones arbitrales, los colegiados tomaron una decisión a priori equivocada.
Manualmente, contaron los segundos que el reloj llevaba parado y decidieron, de forma salomónica, que el Barça había tirado con la posesión acabada. Eso, a pesar de que las repeticiones lo ponen en duda. Tras anular los dos puntos, lo más grave es que no volvieron al momento que se había parado el reloj, cuando Abrines tenía el balón… sino que se la dieron al Madrid.
La expectativa del Barça
El pronunciamiento por parte del club azulgrana pretende que pueda darse una respuesta formal y explicativo por parte de la Euroliga sobre unas acciones que terminaron por decantar el resultado hacia el Real Madrid. No solo por la polémica jugada protagonizada por Vesely, sino también porque las disputas divididas las termina ganando --en la mayoría de veces-- el conjunto local.
Hace algunas horas se llegó a informar de una posible impugnación del partido; sin embargo, para cumplir con ese objetivo tendrían que haber hecho constar su disconformidad en el acta arbitral en el momento en el que se produjo la acción y firmarla, algo que finalmente no sucedió.