La polémica jugada por la que el Barça de basket puede impugnar el clásico

Está claro que el Real Madrid se está convirtiendo esta temporada 2023-24, de momento, en la bestia negra del Barça de basket. El clásico de Euroliga de este pasado jueves, sin embargo, estuvo en el alambre hasta el último suspiro. Fue un partido muy igualado, pero también extraño. En primer lugar, porque no jugaron ni Laprovittola ni Yabusele, dos de los mejores jugadores de ambos equipos.

Después, porque el Real Madrid hizo el peor porcentaje de su historia europea en triples (2 de 22). Y finalmente, tras las idas y venidas de ambos equipos en el marcador --los dos llegaron a mandar por 14 puntos y perdieron la diferencia--, porque en el acta del partido subieron dos puntos de Vesely que fueron borrados.

La equivocación con el reloj

Una polémica que podría aumentar en cuestión de horas, si el FC Barcelona decide impugnar el resultado del partido ante las altas esferas del baloncesto europeo. A falta de 2’48” para el final del primer cuarto y con 6-14 en el marcador, Vesely anotó una canasta de tiro lejano que fue el 6-16.

Faltaban entonces seis segundos para el final de la posesión cuando anotó el checo, pero el reloj de posesión estaba parado. El Madrid sacó de fondo, cruzó campo y, entonces, la mesa se dio cuenta de que el tiempo de posesión llevaba unos segundos sin moverse. Después de cuatro minutos de deliberaciones arbitrales, los colegiados tomaron una decisión a priori equivocada.

Kalinic comanda una jugada del Barça de basket contra el Real Madrid FCB

Manualmente, contaron los segundos que el reloj llevaba parado y decidieron, de forma salomónica, que el Barça había tirado con la posesión acabada. Eso, a pesar de que las repeticiones lo ponen en duda. Tras anular los dos puntos, lo más grave es que no volvieron al momento que se había parado el reloj, cuando Abrines tenía el balón… sino que se la dieron al Madrid.

Decisiones caseras contra el Barça

De nada sirvieron las protestas de Roger Grimau, como tampoco cuando en los últimos segundos una posesión discutible acabó en manos del Real Madrid, después de que presuntamente Jokubaitis rozase un balón con el dedo. Las repeticiones no dejaron claro que eso ocurriera. Decisiones caseras, en definitiva, que el Barça podría protestar después de perder por un punto de diferencia.