El Borussia Dortmund dio una lección al París Saint-Germain. El conjunto alemán venció al equipo de la capital francesa en las semifinales de la Champions League (2-0 en el global de la eliminatoria). Los pupilos de Luis Enrique no fueron capaces, ni siquiera, de anotar un gol durante los 180 minutos. El futbolista más señalado fue Kylian Mbappé.
El atacante francés, próximo fichaje del Real Madrid, pasó completamente desapercibido en la fase previa a la final de la Copa de Europa. El ariete galo atendió a los medios de comunicación después de la eliminación. Un periodista le preguntó, en una situación hipotética, a qué equipo animaría en el último partido, si al Dortmund o al Real Madrid. Esta fue la respuesta de Mbappé.
Una imagen vale más que mil palabras
La estrella parisina prefirió no contestar a la pregunta. La frustración por no alcanzar la final era palpable. La petición del periodista estaba, quizás, fuera de lugar. Así lo creía el protagonista. Mbappé miró hacia arriba como símbolo de desespero y marchó, antes de que fuese tarde, para evitar una mala contestación.
La actuación de Mbappé durante toda la eliminatoria fue muy discreta. Tanto en la ida como en la vuelta. No estuvo al nivel que se espera de un futbolista de su caché. Y del próximo fichaje estrella del Real Madrid. Además, su actitud, como la del PSG, ha dejado que desear en ocasiones. Y así se lo ha hecho saber el Dortmund.
Venganza alemana
El Borussia ha aprovechado para hacer más profunda la herida parisina. En 2020, el equipo de Al-Khelaifi, después de eliminar al Dortmund en Champions, recreó la tradicional celebración de Erling Haaland. Y el PSG lo usó como burla en sus redes sociales.
Lo mismo hizo la entidad presidida por Al-Khelaifi tras acabar con el Barça en cuartos de final. El Borussia ha apoyado al Barça y ha consumado su venganza. Una vendetta que sabe mejor para los aficionados del fútbol tradicional. Y Mbappé supo, en ese momento, que la eliminación era un fracaso.