Dani Olmo y Lamine Yamal celebran un gol en el Barça-Alavés EFE
Lamine Yamal y Dani Olmo salvan los muebles del Barça en el Camp Nou: líderes a la espera del Real Madrid
Los azulgranas se impusieron al Deportivo Alavés (3-1) en un choque que empezó de muy mala manera y que necesitó de la magia del astro de Rocafonda para finalizar positivamente
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Lo importante no es como comienzas, sino como acabas. El Barça salvó los muebles frente al Alavés (3-1) tras un comienzo terrorífico. Los babazorros silenciaron el Camp Nou a los 45 segundos de empezar el encuentro, colocando un 0-1 que auguraba un trágico desenlace en la segunda fecha de los culés de regreso en su templo. Sin embargo, los de Hansi Flick supieron reaccionar y, en el descanso, ya le habían dado la vuelta a la tortilla. El líder de la remontada fue Raphinha.
La cosa va de extremos
El extremo carioca transformó las dos asistencias del choque para los azulgranas y, aparte de las estadísticas fáciles de analizar, su presencia fue un auténtico quebradero de cabeza para sus defensores en la banda. Encabezó la presión, animó a sus compañeros y, como siempre, lideró desde el ejemplo.
Hansi Flick saluda a Raphinha en el Barça-Alavés EFE
Lamine Yamal prueba un regate en el Barça-Alavés EFE
Lamine Yamal también estuvo espléndido. Suyo fue el primer tanto del FC Barcelona, que igualó el luminoso en el minuto 8. Se señaló el escudo, lo besó y lo levantó a la grada. Además, dio el pase de gol a Dani Olmo para completar el 3-1. Al igual que con Raphinha, sus estadísticas no muestran todo lo aportado en el juego azulgrana durante el partido. De hecho, en el minuto 73, protagonizó una jugada en la que llegó a rematar hasta en tres ocasiones, pero no tuvo suerte y el '10' culé se quedó sin su doblete.
El héroe más inesperado
El personaje secundario que más brillo de las filas azulgranas fue Gerard Martín. El defensor de Esplugues de Llobregat jugó de central, algo que Flick lleva probando algunas semanas, y estuvo realmente impresionante. Fue eficaz en lo defensivo y posicional, pero sobre todo, en sus pases al espacio para romper líneas. De hecho, en el segundo tanto del Barça, Martín habilitó la jugada desde la zaga. Partido muy completo.
Gerard Martín cabecea el balón en el Barça-Alavés EFE
Raphinha le da el brazalete a Pedri en su cambio en el Barça-Alavés EFE
Aunque la segunda parte finalizó sin ningún gol, la realidad es que no estuvo exenta de emoción. Una gran razón de dicha afirmación es el regreso de Pedri a los terrenos de juego. El centrocampista canario pisó el césped por primera vez desde el clásico y pudo gozar de 30 minutos sobre el campo. Se vistió el brazalete.