La ascensión y caída de Ansu Fati en el Barça: un destello de luz entre Messi y Lamine Yamal

El cielo está repleto de estrellas que nunca llegarán a brillar. La historia del FC Barcelona muestra centenares de ejemplos de jugadores con un gran potencial que se quedaron a medio camino de ser leyendas en el club culé. En el caso de Ansu Fati, el futuro parecía ser más deslumbrante que nunca. Su irrupción en el escenario azulgrana representó un destello de luz en la oscuridad de uno de los peores momentos históricos de la institución. Cinco años después, su paso por Can Barça finalizará de manera decepcionante.

Un nuevo horizonte

Si nada cambia, el atacante español firmará por una temporada con el AS Mónaco. Lo hará como cedido, aunque tendrá una opción de compra que rondará los 15 millones de euros. La operación llevaba unas semanas encallada por disidencias en cuanto al reparto salarial. No obstante, el jugador ha renovado un año más con el Barça para diferir su salario, lo que ha hecho que la división de sueldo contente a ambos elencos.

Anuar frena a Ansu Fati EFE

Ascenso meteórico en las categorías inferiores

Su marcha del Barça pondrá punto y final a una etapa de más de una década en el club de la Ciudad Condal. Ansu aterrizó en La Masía en 2012. Entonces tenía apenas 10 años y dejó atrás su vida en Sevilla para encontrar una nueva casa en Barcelona. Su primer equipo fue el Alevín A, donde formó una dupla letal de ataque al lado del actual extremo de la Real Sociedad, Takefusa Kubo. Entre ambos anotaron 120 goles en el transcurso de una sola campaña.

Ansu Fati y Takefusa Kubo en un torneo en 2013 REDES

Su descaro y potencial físico le catapultaron a través de las categorías inferiores del Barça y pasó directamente del Juvenil A al primer equipo. En la máxima categoría de la cantera culé era una pieza clave del sistema de Víctor Valdés, el que en ese entonces era el técnico del equipo. Fati tenía aún 15 años, pero su alto nivel le hizo compartir vestuario con compañeros de 2 o 3 generaciones más grandes.

Llega al primer equipo

Tras una buena temporada bajo las órdenes de Valdés hizo el salto al Barça B, aunque no llegaría ni a debutar. Ernesto Valverde, entrenador del primer equipo azulgrana, le citó para participar en la pretemporada. El técnico cacereño quedó maravillado con la habilidad de Ansu y decidió contar con él para el resto del curso.

Gavi, felicitando a Ansu Fati tras asistirle en una jugada de gol / EFE

El 25 de agosto de 2019 se convirtió, en ese momento, en el segundo jugador más joven de la historia del club en debutar en competición oficial con el primer equipo. Tenía 16 años y 298 días. Entró en el minuto 78 sustituyendo a Carles Pérez y aunque no anotó ningún gol, dio destellos de 'crack'. "Tiene cualidades especiales. No se arruga y eso es muy bueno. Estamos ante un jugador con futuro" declaró el 'Chingurri' Valverde tras el encuentro.

Olfato goleador

Su primer tanto no tardó en llegar. Una semana después de su debut, marcó ante el Osasuna, convirtiéndose en el goleador más joven de la historia del FC Barcelona en La Liga. Lo que siguió en esa temporada no fue más que otro recordatorio del talento que atesoraba Fati. Destrozó todos los récords de precocidad posibles por romper. Se convirtió en el goleador con menos edad de la historia en Champions League y en un clásico.

Ansu Fati festeja su gol al Elche EFE

Terminó la campaña 2019/20 con ocho goles y una asistencia. Su gran rendimiento le valió para ganarse su primera convocatoria con la selección española absoluta, con la que participó en cuatro partidos de la Liga de Naciones de la UEFA. Los indicios apuntaban a otra campaña histórica de Fati, pero el siete de noviembre de 2020 todo cambió.

Ansu Fati, durante un partido con la selección española

La primera lesión

Ansu se rompió el menisco interno de la rodilla izquierda y tuvo que pasar por quirófano hasta en cuatro ocasiones. La lesión le mantuvo fuera de los terrenos de juego durante 306 días, lo que le hizo perderse el resto de la temporada 2019/20 y el inicio de la siguiente.

Leo Messi y Ansu Fati, celebrando un gol marcado con el FC Barcelona / REDES

Pese a su grave lesión, el Barça le escogió como el heredero de Lionel Messi dándole el histórico '10'. Regresó al césped en septiembre de 2021 y marcó tres goles en sus cinco primeros partidos. Aunque su retorno dejó con buen sabor de boca a los aficionados culés, Fati poco duró sano. El 6 de noviembre de 2021, casi exactamente un año después de su primera rotura, el extremo español volvió a caer lesionado, esta vez con una rotura en el bíceps femoral izquierdo.

Ansu no levanta cabeza

A la primera lesión se le sumó una nueva en enero de 2022 y otra más en marzo, lo que llevó a Fati a perderse una vez más la mayor parte de la campaña. Regresó en mayo para disputar los últimos cinco encuentros de La Liga, pero su papel fue prácticamente testimonial.

Xavi Hernández, junto a Ansu Fati en un entrenamiento del FC Barcelona / EFE

En el curso 2022/23, el extremo culé encontró la mejor versión física de toda su carrera. Se mantuvo sin casi problemas lesivos y disputó una cifra récord de 51 partidos y 1793 minutos. Aunque su rol no fue como titular, sí que tuvo un papel importante en la conquista de La Liga con el conjunto dirigido por Xavi Hernández.

Cedido a Inglaterra

Su relación con el técnico egarense fue muy complicada. En el inicio de la campaña 2023/24, se hizo evidente que Fati no iba a tener minutos relevantes bajo las órdenes de Xavi, por lo que el extremo español salió cedido del FC Barcelona. Su destino, el Brighton & Holve Albion.

Ansu Fati entrena con el Brighton antes de un partido de Premier League BRIGHTON

En el club del sur de Inglaterra no tuvo el papel que esperaba. Las lesiones le volvieron a atizar. Sufrió una rotura en el gemelo de la pierna derecha que le mantuvo fuera de los estadios durante 70 días. Cuando regresó a la dinámica del equipo no consiguió hacerse con un puesto fijo en el once inicial. Disputó 27 encuentros en los que anotó cuatro goles y dio una asistencia. El Brighton no lo compró y aterrizó una vez más en las filas azulgranas.

Ansu Fati y Lamine Yamal REDES

De estrella a apartado

En el nuevo Barça de Flick, Ansu Fati ha atesorado un rol absolutamente residual. El dirigente bávaro demostró desde el primer momento que no confiaba en el que en su momento estaba llamado a ser el nuevo Messi. La irrupción de Lamine Yamal, el incremento de nivel de Raphinha y la sobrepoblación en la punta de ataque culé le han dejado en jaque en el esquema culé. 11 partidos y 298 minutos, esto es todo lo que ha jugado Fati esta campaña con el entrenador de Heidelberg.

Ansu Fati posa con el trofeo de la Liga en Montjuïc REDES

Su marcha del FC Barcelona representa la rendición de una promesa que apuntaba a ser leyenda del club de su vida. Es un adiós, que aunque no sea definitivo al ser una cesión, sabe a despedida total de una de las mayores perlas de la historia reciente del club culé.