Laporta lanza una advertencia al Barça de Flick: más presión y menos euforia

El barcelonismo sueña con el triplete. Es inevitable. El Barça de Hansi Flick está a 13 partidos de hacer historia. Aunque, para jugarlos todos, primero hay que acabar de eliminar al Borussia Dortmund en los cuartos de final de la Champions League. La ventaja es de 4 goles tras el partido de ida en Montjuïc, pero el presidente Joan Laporta no quiere ni oír hablar de un posible empate.

El mandamás culé ha asegurado antes de un acto del Patronato de Turismo de la Costa Brava de la Diputación de Girona que "todo es posible", pero que "lo importante es que no hemos hecho nada". "Estamos orgullosos. Orgullosos del fútbol que estamos practicando, pero no hemos conseguido nada", ha repetido Laporta.

La euforia se respira en el ambiente. El Barça de Flick invita a soñar, pero Laporta ha optado por un discurso más moderado, similar al que el técnico alemán adopta en rueda de prensa. Son los jugadores, sobre todo, los que se animan a hablar abiertamente de ello.

"Nadie se puede relajar"

Este martes, el Barça deberá mandar un "mensaje": "Mañana el partido es muy importante. Tenemos una oportunidad de dar un mensaje en la Champions de que seguimos muy fuertes. Y para eso mañana hay que ganar". Ni empate ni una derrota, aunque sirva para pasar a semifinales. Laporta quiere la victoria.

Hansi Flick, sonriente antes del Borussia Dortmund-Barça EFE

"He visto a los jugadores y al míster muy mentalizados. Mañana nadie se puede relajar. Hay un rival que merece esta consideración y respeto. Se han visto cosas peores en la historia del fútbol", ha advertido el presidente del Barça. La única vez que se ha remontado un resultado como el que defienden los azulgranas fue en el Camp Nou, cuando el equipo de Luis Enrique tumbó al Paris Saint-Germain de Unai Emery.