El Barça, de momento, solo ha fichado a Dani Olmo y Pau Víctor. Un mediapunta y un delantero. Hansi Flick espera más refuerzos. Nico Williams era el gran objetivo, pero en Bilbao no contemplan la salida de su estrella y en la dirección deportiva azulgrana ya buscan otras soluciones. Flick quiere un extremo desequilibrante en la banda izquierda y la alternativa podría ser Kingsley Coman. Las otras demarcaciones por resolver son el lateral derecho y el mediocentro.
Nico Williams era el fichaje más deseado por Flick y por Joan Laporta. El presidente del Barça necesita un golpe de efecto y la contratación del delantero navarro ilusionaba a la masa social barcelonista. El club tenía un acuerdo con el representante del futbolista, pero su familia y sus compañeros le han convencido para que siguiera en el Athletic. El club rojiblanco afronta una temporada especial. Sueña con ganar la Europa League en San Mamés, sede de la final de la segunda competición europea.
La gran sensación
El Barça ya ha activado el plan B. Los problemas económicos del club son un problema para Laporta, Deco y Flick. El presidente solo se planteaba una importante inversión económica por Nico. Ahora negociará una cesión y en su agenda está el nombre de Coman. El defensa francés, de 28 años, busca una salida del Bayern. Futbolista con mucha clase y regate, su rendimiento fue muy pobre la pasada temporada por varios problemas físicos. En horas altas, en cambio, está Luis Díaz, del Liverpool.
A Flick también le gustaría contar con un lateral derecho muy profundo. De primer nivel. En la banda izquierda cuenta con Alejandro Balde. En la derecha, de momento, solo con Héctor Fort. El entrenador del Barça tiene la posibilidad de colocar a Jules Koundé en dicha demarcación, pero no es la opción que más le gusta.
Cancelo y Frimpong
El Barça espera noticias de Mánchester. Deco negocia otra cesión de Cancelo, con una opción de compra obligatoria que ronde los 20 millones de euros. A Flick, por su parte, le encantaría contar con Jeremie Frimpong, del Bayer Leverkusen, pero vale 40 millones.
El tercer asunto pendiente es el fichaje de un mediocentro de primer nivel. A Flick le gustaría tener a Joshua Kimmich, pero el Barça no puede pagar los 60 millones de euros que pide el Bayern de Múnich y el técnico alemán habla maravillas de Marc Casadó y Marc Bernal, dos centrocampistas formados en la Masía. Dos soluciones de la casa para un Barça con muchos problemas económicos. Demasiados.