El Barça ya tiene cerrado el fichaje de Dani Olmo y ahora debe activar la operación salida. Algunos futbolistas, como Clement Lenglet, son un problema mayúsculo para un club con el límite salarial excedido. En otros casos, como los de Gundogan o Iñigo Martínez, el club podría darles la carta de libertad para ahorrarse su alta ficha. El Barça, sin embargo, necesita hacer caja y las lesiones de Araujo, Frenkie de Jong y Ansu Fati han sido muy lamentadas en las oficinas del Camp Nou. Por eso, el futuro de Raphinha es incierto.
Raphinha llegó al Barça hace dos años, tras pagar Laporta 58 millones de euros fijos y siete en variables al Leeds, comisiones aparte. Entonces, Deco, actual director de fútbol, era el representante del delantero brasileño, un jugador muy intermitente, generoso en la presión, pero con poca puntería en el remate.
La propuesta de Arabia Saudí
El Barça ya sondeó la posible marcha de Raphinha hace un año, pero el futbolista rechazó una oferta de Arabia Saudí. Igual que ahora, el club escuchará cualquier propuesta por su delantero.
Laporta y Deco creen que el Barça podría vender a Raphinha por unos 70 millones de euros. El futbolista, de momento, se muestra reticente y su prioridad pasa por seducir a Hansi Flick. Y su alta presión y compromiso gustan al técnico alemán.
Reunión clave entre Deco y Flick
Flick siempre ha defendido que el Barça debe presionar muy arriba. Quiere delanteros con pegada, pero también con mucho sacrificio defensivo. Y Raphinha es un jugador intenso que puede jugar por las dos bandas y como mediapunta. Para Flick es más solución que problema.
El futuro de Raphinha y otros jugadores debería resolverse lo antes posible. Esta semana, Deco tiene previsto reunirse con Flick para abordar las altas y bajas que quedan por perfilar en un Barça en construcción, condicionado por sus problemas económicos.