El Barça tiene que rebajar su masa salarial. Y, sobre todo, prescindir de todos los jugadores que no entran en los planes de Hansi Flick. De los cedidos, no se cuenta con casi nadie y un futbolista que año tras año es un problema para Joan Laporta es Clement Lenglet, por quien el Barça pagó 35,9 millones de euros al Sevilla en 2018.

El fichaje de Lenglet fue muy celebrado en el Barça. Su primera temporada, con Ernesto Valverde, fue muy buena. Con Ronald Koeman y Xavi Hernández, en cambio, nunca tuvo buena sintonía.

Una ficha muy alta

Lenglet tiene una ficha muy alta en el Barça tras diferir su contrato hasta 2026. Hace dos años fue cedido al Tottenham, que contempló su fichaje, pero finalmente lo descartó. El pasado verano, el defensa francés fue cedido al Aston Villa, equipo en el que ha jugado 25 partidos. No ha sido una pieza básica para Unai Emery.

El Barça busca una solución definitiva para rescindir el contrato de Lenglet, que caduca en junio de 2026. El club le ofrece la carta de libertad, pero el futbolista la ha rechazado porque quiere cobrar todo lo pactado con el Barcelona.

Las ofertas

Lenglet, según algunas informaciones, maneja dos ofertas del extranjero. El West Ham y el Borussia Dortmund podrían haber contactado ya con el futbolista, que también contempla la opción de regresar a España. El Sevilla podría haberse interesado por él.

Lenglet, durante un partido del Aston Villa contra el Sheffield EFE

El gran problema para Lenglet es que los clubes que desean contratarlos no están dispuestos a pagar su ficha, que ronda los 16 millones de euros. El defensa quiere que el Barça, en el mejor de los casos, abone la diferencia.

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