Los próximos meses son trascendentales para el FC Barcelona. Por encima de cualquier fichaje, hay una elección aún más importante: escoger al entrenador del primer equipo. Sobre el próximo técnico se construirán los fundamentos del próximo Barça. El fútbol, por multidisclipinario que sea el club, sustenta la economía, ahora endeudada, de la institución. Y lo que marcará el futuro es si la dichosa pelotita entra entre los tres palos.
De eso depende que el Barça se recupere y reavive su deteriorada economía. Por tanto, la decisión se tiene que tomar con la máxima responsabilidad y sin un atisbo de duda. Pero, por lo que parece, este no es el plan de Joan Laporta, la junta directiva y la parcela deportiva.
Cambios drásticos
La coyuntura actual es la siguiente: hace semanas, las opciones de que Xavi continuara eran mínimas. Deco, en Esport 3, afirmaba que Rafa Márquez no era técnico para el primer equipo. Y, por último, Hansi Flick era el entrenador que más gustaba al presidente, aficionado de la escuela alemana.
Todo ha cambiado cuando queda algo más de un mes para que finalice la temporada. Es necesario configurar la plantilla de la temporada que viene. Cuánto más tiempo, mejor. Ahora, Enric Masip y Deco son los máximos valedores de contratar a otro entrenador que no sea Xavi. Aún así, el entrenador de Terrassa es el que más opciones tiene de ocupar el banquillo el año que viene.
Flick, que va 'loco' por ocupar el puesto de míster del Barça, y gustaba al presidente, pero no genera consenso. Xavi, después de anunciar su dimisión en diferido hasta el 30 de junio, tiene todas las papeletas de seguir. La puerta no está cerrada y tiene una reunión pendiente con Laporta, Yuste, Echevarría y Deco para comentar cuáles son las intenciones del club y las suyas.
El 'bajonazo' de Hansi Flick
Hace exactamente un mes, Laporta estaba entre dos entrenadores: Roberto de Zerbi o Hansi Flick. La contratación del técnico italiano es complicada por su cláusula de 15 millones de euros. En cambio, el entrenador alemán está sin equipo. Puede llegar gratis. Era una decisión fácil. Su representante es Pini Zahavi, amigo del presidente, y es uno de los dos entrenadores en la historia del fútbol que cuentan con un sextete.
Flick, consciente del interés, quiso demostrar su compromiso por la causa y marchó a Manchester para hablar con Pep Guardiola. Fue el invitado del ex del Barça en un partido de la Premier League, como contamos en Culemanía. Allí pudo conocer todo sobre la institución azulgrana. 30 días después, el presidente ha cambiado totalmente de parecer, en una situación perfectamente comparable a algunas ya vividas en su segundo mandato.
El paraguas de Laporta
El máximo dirigente del Barça, de forma abierta, ha afirmado que desea construir un club familiar. Flick, a diferencia de Xavi, tiene experiencia en la élite, pero sería un extraño dentro del esquema del club. El entrenador de Terrassa, en cambio, siempre ha protegido, y hablado a las mil maravillas, de Laporta. Lo ha calificado como el mejor presidente de la historia de la entidad.
Con Hansi Flick se podrían reproducir situaciones similares a las vividas con Ilkay Gundogan. Xavi ha sostenido, al menos públicamente, al Barça en sus ruedas de prensa cada tres días. Es un barcelonista más y ha sido la cara visible en una temporada tan dura como ha sido la actual.
Como el centrocampista alemán, Flick es una persona con un carácter rígido, que viene de la cultura germana, que ya ha provocado algún problema en el vestuario del Barça, como el vivido entre Gundogan y Ronald Araujo. Hansi no tendría problemas en hablar públicamente de estos temas, ni tiene un lazo sentimental con Laporta o el club.
No encaja en la familia
De esta forma, Hansi Flick no encaja en un club familiar como el de Laporta. En la estructura ejecutiva ya pasó algo parecido al principio del segundo mandato del abogado catalán. El mandatario entró en el club acompañado por el CEO Ferran Reverter.
Fruto de las desavenencias entre ambos por la manera de gestionar la institución, Reverter decidió marcharse del Barça. También venía de la cultura germana al ser el CEO de Media Markt Iberia, una compañía cuya sede central está en Alemania. Laporta quería a Reverter en un principio y después cambió de opinión. Asimismo, Flick era el candidato que encabezaba a la lista y ahora está por detrás de Xavi y Márquez.
Fuentes muy cercanas a Laporta remarcaron a este medio cuál es el modelo de gestión del Barça en estos momentos, muy presidencialista. Este es el primer impedimento para firmar a Hansi Flick, que como Reverter y otros ejecutivos, podría no coincidir con las ideas del máximo mandatario. Puede llevar la contrario en muchas ocasiones. Laporta quiere gente de confianza, y Xavi siempre le defiende.