Xavi Hernández atribuyó la eliminación del Barça a la expulsión de Ronald Araujo, que consideró injusta. Aseguró que, 11 contra 11, su equipo era mejor y tenía muy controlada la serie. El técnico de Terrassa reaccionó pronto, pero tal vez no tomó la mejor decisión y cometió varios errores que penalizaron al grupo azulgrana.
1. Impotentes ante Dembelé
Xavi Hernández había encontrado el equilibrio deseado en defensa con Koundé por la derecha y Cancelo, por la izquierda. El francés, más contundente y defensivo, está en un gran momento de forma y corrige muchos errores de sus compañeros. El portugués, mientras, disfruta de mucha más libertad de movimientos. Es un futbolista con mucha proyección ofensiva.
Cancelo, sin embargo, no es fiable en labores defensivas y Dembelé castigó muy bien su fragilidad. El lateral portugués estuvo lento en el primer gol del PSG y provocó un absurdo penalti en la segunda parte. Dembelé fue el mejor del equipo francés. Mucho mejor que Mbappé.
2. Lamine Yamal, sacrificado
El entrenador del Barça reaccionó rápidamente tras la expulsión de Araujo. Tal vez, demasiado rápido. Prescindió de Lamine Yamal, muy acertado hasta entonces y decisivo en el gol azulgrana, con su asistencia a Raphinha. Sin él, el PSG se sintió menos amenazado y fue mucho más atrevido por la banda izquierda.
3. Cancelo, desbordado
Xavi pudo haber prescindido de Cancelo tras la expulsión de Araujo y retrasar a Raphinha, un futbolista muy sacrificado e intenso. El jugador portugués, en cambio, se vio desbordado. No fue la muralla que necesitaba un Barça que no supo jugar con uno menos. Xavi debió ser más pragmático.
4. El mismo plan
El técnico de Terrassa quitó a un delantero, pero el Barça concedió muchos espacios en la zona de tres cuartos. Xavi no quiso que su equipo reculara. Pudo montar un muro con ocho o nueve jugadores en campo propio pero no quiso. Por un día, Xavi pudo haber sido un poco mourinhista. No lo fue y fue víctima del famoso ADN Barça.
5. Tercera expulsión
Xavi es un entrenador que vive los partidos intensamente. Lo protesta todo. Como jugador era tranquilo, pero como técnico gesticula y grita constantemente. Contra el PSG también fue expulsado en un partido que requería la máxima inteligencia posible. En la rueda de prensa posterior admitió que se había equivocado.
6. Joao Félix, sin protagonismo
El Barça reaccionó tras el tercer gol del PSG, más por actitud y voluntad que por tener las ideas claras. Con la eliminatoria en contra, Xavi se la debió jugar con Joao Félix, posiblemente el mejor futbolista entre líneas, un jugador que siempre encuentra espacios y filtra bueos pases. El delantero luso fue el mejor en la victoria en el campo del Cádiz, pero nunca ha sido un futbolista del agrado de Xavi.