El Barça cerró en Madrid su semana grande de la actual temporada. Derrotó al Nápoles en la Champions y al Atlético en la Liga. Y Xavi está encantado con el cambio de sus futbolistas. En el Metropolitano, el conjunto azulgrana jugó un gran partido. Sufrió al principio y disfrutó al final.
Llega bien el Barça al tramo final de la temporada. Con gasolina. Es una pena, sin embargo, que el equipo haya tirado ya la Copa del Rey y la Supercopa de España. Y, sobre todo, la Liga. A ocho puntos del Real Madrid, el rendimiento del Barcelona no ha sido satisfactorio.
La preparación física
Al Barça se le ha visto sin ideas. Sin chispa. Sin fútbol. La temporada ha sido un calvario para un equipo que aspiraba a todo. Iván Torres, el preparador físico, no supo poner al equipo a un buen nivel hasta las últimas semanas. Y fue señalado por las muchas lesiones musculares que acumula la plantilla.
En Madrid, los problemas continuaron. Una hora y media antes del partido, el Barça anunció que Andreas Christensen sería titular, pero el defensa danés sintió molestias en el entrenamiento y fue sustituido por Fermín. Igual que Iñigo Martínez, que sigue sin recuperarse de sus problemas físicos, y Ferran Torres, que sigue sin entrar en una convocatoria.
Los futbolistas, en privado, han expresado su malestar sobre el estado de forma del equipo. En Barcelona se entrena mucho menos que en otros equipos. Y el resultado ha sido decepcionante. Ahora, por fin, se vislumbran brotes verdes.