El Barça llega al gran examen de la Champions muy castigado

Las lesiones se ceban con el Barça. Una vez más. Más allá del mal juego durante toda la temporada, el equipo de Xavi Hernández acumula muchos problemas físicos en el curso actual. Ya sean percances traumáticos o problemas físicos. En San Mamés, dos futbolistas volvieron a lesionarse y prácticamente están descartados para el partido de vuelta de los octavos de final de la Champions, contra el Nápoles.

Xavi, una vez más, deberá improvisar un nuevo centro del campo. Tres futbolistas de gran nivel, Gavi, Frenkie de Jong y Pedri, están lesionados. De momento resiste Gundogan y el técnico tendrá que mover sus fichas con inteligencia contra el Nápoles. El centrocampista alemán será titular. También, Christensen. Y la tercera plaza, posiblemente, será para Fermín o Sergi Roberto.

La preocupación de Xavi

"Me imagino que serán para partidos. Estamos tristes", manifestó Xavi en Bilbao cuando le preguntaron por las lesiones de Frenkie de Jong y Pedri.

Frenkie de Jong fue el primero en lesionarse. Tras un salto con Unai Gómez, el centrocampista neerlandés sintió un gran dolor. Fue atendido por el doctor Ricard Pruna y pronto se percantó de que su lesión de tobillo puede ser importante. No podía andar y tuvo que retirarse del campo. Su cara le delataba. Sentía dolor y frustración.

Lesión de Frenkie de Jong en San Mamés en la jornada 27 de Liga EFE

La tercera lesión del curso

Los problemas de Xavi se agravaron un minuto antes del descanso. Otro centrocampista, Pedri, se lesionó en el minuto 44 y también se fue del campo entre lágrimas. Desconsolado. El futbolista canario ya acumula tres lesiones en el curso actual.

Pedri se va llorando de San Mamés: roto, otra vez EFE

Xavi se teme lo peor. Dos lesiones de larga duración en un momento crucial de la temporada. En Bilbao, el Barça empató y gracias, y sigue sin escalar a la segunda posición de la tabla. En la Champions se jugará el pase de cuartos con la plantilla diezmada. El equipo se juega mucho. El club, más. Caer en cuartos tendría un impacto económico muy negativo: 15 millones de euros. Y el Barça actual no está para rebajas.