Robert Lewandowski cambió el Bayern por el Barça hace un año y medio y se convirtió en el fichaje estrella de Joan Laporta para reactivar a un club que necesitaba una estrella global. La primera temporada del delantero polaco fue muy buena, pero sus prestaciones han bajado en la actual y su futuro en el club es incierto. Lewandowski quiere seguir, pero pone condiciones.
El Barça espera noticias de Lewandowski. El futbolista actual percibe 26 millones de euros brutos en el curso actual y su ficha subirá hasta los 32 millones en el próximo ejercicio. En en club aseguran que no contemplan el traspaso del delantero, pero añaden que respetarán su voluntad de seguir o no en Barcelona.
Los técnicos alemanes
Lewandowski, según algunas informaciones, condiciona su continuidad en el Barça al próximo proyecto deportivo del club. Un proyecto en el que no estará Xavi Hernández y en el que habrá cambios en la plantilla.
El delantero polaco no se pronunciará hasta conocer el nombre del futuro entrenador del Barça. De momento, hay más rumores que realidades. A Laporta, por ejemplo, le gustan dos entrenadores alemanes que conocen perfectamente a Lewandowski: Jürgen Klopp y Hansi Flick.
El caso de Oriol Romeu
Lewandowski también quiere ver los cambios que se producirán en la plantilla. Sabe que la situación económica del club es delicada y habrá salidas importantes. Falta por ver qué jugadores llegarán en el mercado de verano. La prioridad básica será el fichaje de un mediocentro de garantías. El experimento con Oriol Romeu no ha funcionado.
El Barça, mientras, no quiere hablar de una posible salida de Lewandowski, aunque en el club admiten que su ficha es muy elevada para un futbolista que en verano cumplirá 36 años.
El rendimiento actual
La pasada temporada, Lewandowski marcó 33 goles con el Barça y fue decisivo en el primer tramo. En la actual, asuma 14 goles y seis asistencias en 31 partidos. Ya no es un jugador intocable para Xavi, quien quiere dosificarlo para que llegue al tramo final de la temporada en las mejores competiciones. O, como mínimo, para las eliminatorias de la Champions, la única opción real del Barça de salvar la temporada.